Iberia prepara un ERE para 1.500 empleados de más de 60 años tras volver a beneficios

Iberia ha empezado a analizar la aplicación de un despido colectivo mediante un expediente de regulación de empleo (ERE) para adaptar su plantilla a las necesidades operativas de la aerolínea, que volverá a los beneficios tras dos años de pérdidas por la pandemia. Según fuentes próximas a la negociación, la compañía propiedad de la hispano-británica International Airlines Group (IAG) podría desprenderse de hasta 1.500 de los trabajadores actuales mayores de 60 años, es decir, cerca del 10% de la plantilla total.

El proceso está en fase inicial después de que los sindicatos CCOO y UGT le preguntaran “si la empresa tiene previsto, o considera que podría producirse, un ajuste de personal durante la vigencia del convenio colectivo y en qué términos se afrontaría, en su caso, el mismo”, una vez firmado el nuevo acuerdo marco con los representantes de los trabajadores para aplicar una subida salarial de más del 8% en 2022 y 2023 tanto para los pilotos como para el personal de tierra.

La respuesta de Iberia fue que, “tras un análisis preliminar de la situación por la que atraviesa la compañía, ha puesto de manifiesto la concurrencia de circunstancias que aconsejan profundizar dicho análisis para, en su caso, acometer a través de los cauces legalmente establecidos al efecto, un procedimiento colectivo que permita adaptar la plantilla de trabajadores y corregir posibles desajustes”.

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Iberia ha propuesto a CCOO y UGT que las posibles bajas sean voluntarias para las personas mayores de 60 años, según ha adelantado 'La Razón'. Actualmente, según fuentes internas, sobre una plantilla de unos 15.700 empleados, la aerolínea cuenta con unos 1.500 trabajadores que tienen esa edad, por lo que el ERE afectaría a cerca de un 10% de la masa laboral. Los sindicatos han respondido mediante una carta en la que valoran de forma “positiva la respuesta de la compañía, ya que dicha medida, una vez se afronte un análisis y negociación más profundos, permitirá, siempre voluntariamente, el acogimiento de los trabajadores y las trabajadoras a medidas de acompañamiento social que favorezcan una restructuración de la empresa”.

Después de dos años de pérdidas históricas, en que la aerolínea presidida por Javier Sánchez-Prieto se anotó números rojos de 1.411 y 220 millones en 2020 y 2021, respectivamente, Iberia ha recuperado el vuelo y espera terminar el año en beneficios. De hecho, es la división de IAG que mejores resultados ha tenido en el primer semestre del año gracias a la fuerte demanda de billetes hacia Latinoamérica. Por eso, en estos momentos, podría afrontar los costes de indemnización que conlleva un ERE, del que parcialmente se haría cargo el SEPE en primera instancia. Al tener beneficios, Iberia estaría obligada posteriormente a devolver las cantidades abonadas a los trabajadores por el organismo del Ministerio de Trabajo, que serían ingresadas en el Tesoro.

La sociedad, que en 2020 pidió un crédito de 1.000 millones a un grupo de bancos con el aval del Instituto de Crédito Oficial (ICO), ha llevado a cabo en la última década varios planes de racionalización de plantilla. El último, el aplicado entre 2017 y 2019, afectó a 955 personas y tuvo un coste estimado de 170 millones. Anteriormente, la compañía acometió otro en 2013 dentro de lo que denominó 'Plan de Transformación', que supuso la salida de 3.141 empleados y una reducción salarial de entre el 7 y el 14% para el personal de tierra.

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Los 4.000 de Air Europa

En una reciente entrevista en 'Expansión', Sánchez-Prieto aseguró que "en los próximos 24 meses nos situaremos en los niveles de beneficio de antes de la pandemia", además de aseverar que recuperará el EBIT de unos 500 millones de 2019 entre 2023 y 2024. Unas previsiones que no incluyen la más que probable compra del 100% de Air Europa, de la que Iberia ya tiene el 20% tras pagar 100 millones de euros mediante un préstamo participativo.

Si las negociaciones progresan y las autoridades de competencia de la Unión Europea lo aprueban, la antigua aerolínea de bandera se hará con la mayoría del grupo fundado por la familia Hidalgo el próximo verano. Una adquisición que supondrá asumir una plantilla adicional de 4.000 empleados.