El presidente del Betis y los Godia pierden al CEO y otros directivos de su empresa de renovables

Menos de un año después de su llegada, el actual consejero delegado de la empresa de renovables Prodiel, Alex Monzó, ha decidido poner punto y final a su andadura. Según confirman fuentes del sector, Monzó ha dejado la compañía propiedad del presidente del Real Betis Balompié (45%), Ángel Haro; de los Godia, inversores próximos a La Caixa de la alta burguesía catalana (45%), y José María Vicente (10%).

Según señalan las fuentes consultadas, Monzó pasará a liderar en España Atlas Renewable Energy, otra firma independiente de renovables de origen americano y propiedad de Global Infraestructure Partners (GIP), fondo que cuenta con importantes inversiones en España como el 20% de Naturgy. Atlas desembarca en territorio nacional para expandirse con un ambicioso plan de inversión.

La salida del máximo ejecutivo de Prodiel se produce después de lograr cerrar el plan de refinanciación para la compañía. Su rol de máximo ejecutivo pasará a ser desempeñado por Miguel Somé, hasta ahora vicepresidente de la compañía. La firma sevillana venía de sufrir unos fuertes números rojos (beneficio operativo negativo de 50 millones de euros en 2021). Además, ante el adverso contexto, ha decidido renunciar al negocio de la construcción de parques fotovoltaicos, una división fuertemente castigada por la subida de precios de los componentes de estas infraestructuras (acero, aluminio, etc.) en un sector cuyos márgenes ya venían siendo muy ajustados. La crisis le llevó a tener que reducir la plantilla un 8%.

El último servicio de Monzó en Prodiel ha sido superar un importante hito financiero. Con el negocio en crisis, la firma ha logrado refinanciar un préstamo con la banca de más de 100 millones de euros. Según avanzó El Confidencial, BBVA y Caixa estaban entre los principales artífices que han logrado evitar el 'default' tras otorgar un año más de carencia al crédito que le vencía. Santander, Sabadell, Bankinter, Ibercaja, Abanca y Aresbank también son acreedores. PwC y FTI han trabajado en dicho acuerdo.

La salida de Monzó se suma a una larga lista de altos ejecutivos de esta empresa que ya han abandonado la compañía. Pese a que ha decidido no continuar con el negocio de lo que se denomina EPC, proyectos de renovables llave en mano, aún sigue adelante con la promoción de parques para importantes clientes como Endesa, Everwood Capital o Smartenergy. La firma busca integrarse en otro gran grupo con mayor músculo financiero.

Además del acuerdo con los bancos para refinanciar los 114 millones, ha vendido su 50% de la sociedad DVP Solar, creada hace un año con la compañía Everwood, y el 50% de la sociedad Greenfield a la empresa Smart Energy (a la que ha vendido una cartera de proyectos por un 1 GW).

Goteo de salidas de ejecutivos

Otra de las salidas más sensibles ha sido la de Mario Serrano. El que fuera hasta hace pocas fechas director general de Prodiel, encargado precisamente del área de EPC desmontada, ha recalado en Acciona. A este hay que sumar la marcha de José Manuel López Cepeda, director de Desarrollo de Negocio, que ha emprendido camino por su cuenta con dos proyectos denominados Taiyo Energy y Solartree. El otro cofundador de Taiyo Energy y Solartree es Diego Fernández, director de Compras en Prodiel hasta este año. Tras su salida de la empresa, estuvo tres meses en el área de renovables de Goldman Sachs.

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Otra salida importante es la de Francisco Javier Fructuoso Brenes. El que fuera responsable corporativo de Finanzas y Tesorería cambió de aires y ahora es director financiero de Dam Salud. Además de la llegada de Serrano, Acciona ha pescado en el río revuelto de Prodiel. Al menos otros dos técnicos de Prodiel, Carlos Gimeno y Manuel Bernal, han fichado este 2022 por la multinacional de la familia Entrecanales.

Ahora está por ver cómo recompone el equipo Prodiel, que llegó a ser una de las primeras constructoras de parques fotovoltaicos del mundo. Las fuertes subidas de precios por los cuellos de botella generados tras la pandemia han sido la gota que ha hecho saltar las costuras de esta empresa.