Iberdrola reúne a su cúpula tras reclasificar como verdes sus centrales contaminantes

Iberdrola tenía previsto convocar este fin de semana su comité ejecutivo en Galicia en una reunión especial para analizar la marcha de los negocios en el primer semestre del año, con un fuerte descenso del beneficio, y preparar la segunda parte del ejercicio, amenazado por un nuevo endurecimiento fiscal por parte del Gobierno. Mientras tanto, la compañía eléctrica ha decidido reorganizar sus fuentes de producción de energía, que ahora serán todas calificadas como 'sostenibles', incluidas las nucleares y las plantas de gas.

Según han indicado fuentes próximas al grupo, Iberdrola había preparado una reunión de 48 horas con los principales directivos de España, la principal fuente de ingresos del 'holding' hasta 2021. En principio, el encuentro lo iba a liderar Mario Ruiz-Tagle, el nuevo consejero delegado de la filial española, que ha sustituido a Ángeles Santamaría, para exponer al comité ejecutivo la estrategia a seguir ante la volatilidad de los precios de la electricidad y los cambios regulatorios y fiscales aprobados por el Gobierno de Pedro Sánchez.

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Otras fuentes indican que Iberdrola suele mantener dos reuniones anuales con este formato de fin de semana. Una antes del verano, para analizar los resultados del primer semestre y planificar la segunda parte del año, y otra a finales del ejercicio, para preparar el siguiente. No obstante, agregan que la de este fin de semana tiene especial relevancia, dado que el beneficio de Iberdrola España cayó un 29% entre enero y marzo, hasta los 337 millones de euros, evolución que no ha mejorado sensiblemente entre abril y junio.

La compañía explicó este descenso inusual por "los altos precios de la energía que no ha traspasado a sus clientes, a los que ha vendido la energía a precios fijos acordados previamente". Incremento que sí ha aplicado posteriormente, según publicó Bloomberg, que se hizo con una carta en la que la primera compañía europea del sector anunció a sus clientes una subida del 140% del gas. Una decisión comercial, derivada del aumento del precio en los mercados internacionales, que Sánchez ha tratado sin éxito de compensar con el llamado tope del gas.

Un escenario histórico que Iberdrola va a afrontar con una reestructuración societaria de las divisiones que forman la unidad de España. La compañía se va a dividir en tres negocios: Redes, Energía y Energía Sostenible. La primera englobará toda la infraestructura histórica de la empresa, que ha puesto a la venta en hasta dos ocasiones, sin que finalmente diera el paso a desprenderse parcialmente de este activo. La segunda agrupará lo que denomina Iberdrola Clientes, Clientes Internacional y Cogeneración.

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Donde está la gran novedad es en la tercera, ya que bajo el título de Iberdrola Energía Sostenible se incluye el negocio puro de renovables, el que hasta ahora llevaba el calificativo de sostenible por ser electricidad obtenida de fuentes limpias. Pero, a partir de ahora, también el de generación térmica (las plantas que funcionan con combustibles fósiles, como el gas natural o el carbón), las nucleares y las de ciclo combinado, que funcionan exclusivamente con gas. La compañía ya ha comunicado esta nueva estructura a los sindicatos, ya que supondrá el traspaso parcial de algunos empleados entre las sociedades.

Según algunas fuentes, este cambio de nomenclatura tiene mucho más significado que lo que podría ser a primera vista. Con esta recalificación, Iberdrola se adapta a la decisión adoptada el pasado mes de febrero por la Comisión Europea a través de la cual definió como sostenibles o verdes las plantas nucleares y de gas. Un cambio polémico, fomentado por Francia, al que se opuso el Gobierno de España, que ha apostado por las fuentes renovables como la gran estrategia para reducir la contaminación a medio y largo plazo. Sánchez envió una carta a Bruselas, apoyada por Austria, Dinamarca y Luxemburgo, en la que denunció que no se cumplían los requisitos legales y científicos para que estas energías fueran consideras sostenibles.

"La crisis actual en el mercado demuestra la necesidad de alcanzar la autonomía energética"

Este sello de 'sostenible' permite a las empresas financiarse a tipos de interés más baratos, así como acceder a subvenciones públicas facilitadas por las administraciones que fomentan el tránsito de las energías fósiles a las limpias. Iberdrola no ha respondido a las llamadas de El Confidencial para dar su versión sobre esta información.

En la presentación de los resultados del primer trimestre, anunciados a finales de abril, el presidente de Iberdrola, Ignacio Sánchez Galán, aseguró que "la actual crisis en el mercado energético demuestra la necesidad de acelerar la transición para alcanzar la autonomía energética en Europa y descarbonizar nuestra economía. Para ello, se necesitan soluciones basadas en el marco europeo y en un diálogo continuo entre los agentes y las administraciones".