Vueling (IAG) trata de convencer a Bruselas de que apoye el combustible verde para vuelos

Vueling, aerolínea de IAG, trata de convencer a las autoridades europeas de que apoye el combustible sostenible para lograr la descarbonización del transporte aéreo. En el contexto de la cumbre del transporte, que organiza la Comisión Europea esta semana en Lyon, la compañía aérea ha realizado un vuelo comercial entre Barcelona y Lyon (Francia) en el que, según sus estimaciones, ha reducido un 72% las emisiones de CO₂ con respecto a lo que sería un vuelo igual, pero sin usar ecocombustibles y aplicar medidas de eficiencia.

En concreto, la empresa con sede en Barcelona estima que, gracias al uso de combustible procedente de residuos, conocido en el sector como SAF ('sustainable aviation fuel'), la firma logra una reducción de emisiones del 42%, mientras que la eficiencia de los motores nuevos de su avión Airbus, de clase NEO, logra otro 18%. La conducción eficiente en el vuelo lograría otro 11% de reducción de emisiones de gases de efecto invernadero.

Con esta cifras, el director de sostenibilidad de Vueling, Frank San Martí, pide a las autoridades, en el seno del foro 'Connecting Europe Days 2022' en el que participa la comisaria de Transportes, Adina Valean, que se haga una apuesta decidida por este tipo de combustibles, ya que actualmente el problema es el precio. Según detalla, el coste oscila entre tres y cinco veces más del queroseno usado por la mayoría de aeronaves. Según considera, si los diferentes organismos públicos incentivan la demanda de este tipo de ecocombustibles, se logrará avanzar en la descarbonización del transporte aéreo, en línea con los objetivos de cero emisiones que pretende la Unión Europea de cara a 2050.

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Para este propósito, Vueling trabaja con Repsol, quien ha suministrado desde su planta química de Tarragona el combustible sostenible. No obstante, esta no es la única compañía con la que trabaja para este fin. La aerolínea firmó recientemente una alianza con el gigante francés Total.

En esa ambición por lograr que se aumente la demanda de estos combustibles sostenibles, Vueling también está aplicando ya el sistema Avikor, tras anunciar una asociación a tal efecto con Exolum (antigua CLH). Este programa permite a los pasajeros pagar un extra a su billete de vuelo para que la aerolínea utilice el carburante SAF. De esta forma, el pasajero paga para que el 2% de su consumo sea de origen verde, a lo que Vueling añade otro 2%.

Pese a todo lo anterior, el director de sostenibilidad de Vueling lamenta la falta de apoyo en España y Europa a este tipo de combustibles sostenibles, más allá de los programas que hay de hidrógeno verde. Según afirma, no hay programas relacionados con los fondos europeos de recuperación Next Generation que apoyen el uso de estos carburantes eco, una de las líneas estratégicas de los fondos europeos. A diferencia de lo anterior, el ejecutivo de Vueling asegura que Reino Unido o EEUU tienen ambiciosos programa de apoyo al SAF.

Vueling lamenta la falta de apoyo a la demanda de ecocombustibles que sirvan para la descarbonización del transporte aéreo

No solo Vueling está tratando de avanzar en esta línea dentro del consorcio de la aerolínea IAG. La propia cotizada se ha marcado el objetivo de tener un 10% de su combustible de origen renovable de cara a 2030. Otras firmas como Iberia también están trabajando mano a mano con Repsol para contribuir también a la descarbonización del transporte aéreo.

Frente a lo anterior, no obstante, hay diversas voces a nivel político que abogan por la sustitución de los vuelos de corto radio por otros medios de transporte como el tren. Esta es una línea que está explorando, entre otros, el Gobierno de España, que ha encargado un estudio a INECO para que trate de ver qué posibilidades tendría el AVE frente a vuelos internos dentro de España.