De Pablo (Cepsa): “Podríamos realizar operaciones de M&A que aceleren nuestro plan de crecimiento”
La recién nombrada directora financiera de la compañía, que asumió el cargo en enero, nos cuenta acerca de la situación del mercado energético, previsiones y el camino a seguir en esta nueva etapa
En enero, Carmen de Pablo asumió el cargo procedente de Gestamp, con el objetivo de “maximizar los retornos para nuestros accionistas” y de impulsar la transformación sostenible de Cepsa desde una nueva dirección financiera que incluye también las funciones de Estrategia y ESG (Environmental, Social and Governance).
Experta en salidas a bolsa y M&A, la también exdirectora de Banca de Inversión en Morgan Stanley, considera que el precio del barril se situará en una banda de entre 70 y 130 dólares, y apuesta por el liderazgo de España en la producción de hidrógeno verde, tecnología donde la compañía ya trabaja. Desde El Confidencial hemos hablado con la nueva directora financiera de la compañía sobre la actual situación del mercado, previsiones y pasos a seguir en esta etapa.
PREGUNTA. El año pasado, el flujo de caja libre se multiplicó por más de ocho gracias a la mejora del mercado y a medidas de optimización y eficiencia. ¿Cuáles fueron esas medidas? ¿Están teniendo continuidad en este curso?
RESPUESTA. Los temas de optimización y eficiencia siempre tienen que estar en la agenda de todas las empresas y en nuestro caso, también. Actualmente, la estructura de costes está bastante optimizada, pero las iniciativas siguen todavía en marcha buscando esa mejora de la rentabilidad en general.
Sí que es cierto que la situación de covid ha supuesto una oportunidad para tomar medidas adicionales de cambio, de mejora y de optimización en general. Son programas que buscaban la resiliencia en un entorno muy complicado, de una caída del negocio muy pronunciada y que vienen a mejorar toda la línea de ventas con clientes y la de costes para incrementar el margen.
P. ¿Y a nivel de ajustes?
R. Los ajustes que se tenían que hacer, se han hecho. Es más, ahora mismo estamos pasando a una fase de crecimiento, de ejecución de la estrategia, donde necesitamos perfiles específicos y contar con toda nuestra gente en plantilla y, si me apura, un poquito más, para llevar adelante esas iniciativas.
P. Hasta 2030 se tiene previsto invertir 8.000 millones de euros. ¿Cómo se va a financiar esta cantidad? ¿Hay algún plan de volver a recuperar la idea de salir a bolsa?
R. El plan estratégico es un plan que se autofinancia, aunque es cierto que los ‘cash flows’ más altos nos vienen hacia el final de la década. Los accionistas están totalmente alineados con el plan y nos están dando la oportunidad de acelerar el crecimiento si surgen las oportunidades, ya que es un plan orgánico. No hemos incluido operaciones que podrían darse de M&A que aceleren esa ambición.
Respecto a la salida a bolsa, ahora mismo estamos muy bien como estamos. Sí que es cierto que dentro de un horizonte a medio plazo podría contemplarse una potencial salida a bolsa.
P. A nivel de mercado, ¿qué perspectivas tiene de evolución del precio del crudo?
R. El entorno actual nos lleva a pensar que estaremos en precios de crudo por encima de los 70 dólares, incluso más cercanos a los tres dígitos este año. Diría una banda de entre 70 y 130 dólares el barril. Los movimientos van a venir muy ligados a lo que pase con el entorno geopolítico en Ucrania. Además, las inversiones no van a llegar a tiempo suficiente para poder generar la producción necesaria para el nivel de demanda.
P. La pregunta recurrente, ¿por qué cuando sube el crudo, la gasolina sube rápidamente en las estaciones, pero cuando baja no se traslada tan rápidamente?
R. Esa es la percepción que se puede tener, pero las subidas y las bajadas al final llegan. Quizá como consumidor final lo notas más en el bolsillo, pero llegar llegan. En este sentido destacaría el descuento de hasta 45 céntimos el litro que está realizando Cepsa.
P. Precisamente las gasolineras más pequeñas os acusan a las grandes de aprovechar esta coyuntura para entrar en una guerra de descuentos que no pueden seguir, pues no tienen el músculo financiero suficiente. ¿Qué valoración hace?
R. Estamos apoyando financieramente a todas las gasolineras que están dentro de nuestro perímetro, para ayudarles a adelantar ese descuento.
P. ¿Cree verdaderamente posible que los países logremos alcanzar la neutralidad climática para 2050?
Creo que se puede y, de hecho, en Cepsa estamos pasando de ser una compañía que no nos contentamos con la neutralidad, sino que queremos sumar en positivo. No ser ‘net zero’, sino ser ‘net positive’. Estamos en el momento en el que una empresa energética puede realizar el cambio. En ese sentido, es un proyecto muy ambicioso. Obviamente, el camino todavía es muy largo y hay que ir saltando muchas piedras; sí que es cierto que también el horizonte que nos ponemos es de largo plazo, pero creo que ahora se dan una serie de factores que pasan también por la conciencia como ciudadanos en la contribución que tenemos que hacer si, por ejemplo, viajamos o usamos la bicicleta en lugar del coche, sobre todo las nuevas generaciones. También hay un afán de todos los reguladores de dar ese apoyo institucional para llevar iniciativas de cambio e implicación de las empresas. Todos queremos participar y, en este caso, Cepsa, siendo una compañía que sigue produciendo combustibles fósiles, tiene el reto de pasar a producir moléculas verdes. Es un cambio radical y del que estamos toda la empresa convencidos.
P. ¿Cuál es su nivel actual de emisiones y qué les exige ese objetivo?
R. Estamos todavía dando los pasos. Tenemos en marcha una parte muy importante de iniciativas con el objetivo de descarbonizar primero nuestras propias actividades y, luego, las de nuestros clientes. En todas las inversiones que estamos acometiendo buscamos las eficiencias energéticas. Tenemos identificados más de una veintena de proyectos muy específicos para reducir las emisiones de carbono en las actividades que nosotros tenemos, tanto en nuestros Energy Park (antiguas refinerías), como en las actividades que hacemos en nuestro ámbito petroquímico, etcétera. Al mismo tiempo, ayudar a fomentar energías renovables. Tenemos una cartera de 1,5 GW de renovables con el objetivo de ampliarlo a siete, así como proyectos en desarrollo de biocombustibles de hidrógeno, etcétera.
El objetivo es reducir entre 2020 y 2030 nuestro Scope 1 (emisiones directas) y 2 (indirectas) un 55% frente a 2019 y en el Scope 3 (otras emisiones), reducir entre un 15% y un 20%. Todo ello con un objetivo de neutralidad antes de 2050. Habrá que ir viendo cómo progresamos todos en ese objetivo ambicioso, que transformará completamente nuestra actividad.
P. Ante la escalada de los costes energéticos, ¿son las energías verdes la solución para abaratar la electricidad?
R. Para abaratar la electricidad seguro que hay diferentes alternativas. Ahora en la agenda hay que tener en cuenta la seguridad energética, la independencia energética y el contexto actual, que debería dar más apoyo a que vayamos adoptando energías más sostenibles a futuro, buscando tener menos dependencia energética de países terceros. Se han puesto medidas temporales. Lo que sí que va a abaratar, primero los costes, son las nuevas tecnologías. Y España tiene una capacidad en generación eólica y en solar de liderazgo. Debemos aspirar a ser líderes en biocombustibles y, sobre todo, en hidrógeno por las circunstancias que tenemos como país.
P. El impulso del vehículo eléctrico parece estar en un círculo vicioso. Los consumidores no compran por los precios y por la falta de puntos de carga; los fabricantes de vehículos se quejan de falta de puntos de carga; y las gasolineras dicen que no invierten en puntos de recarga porque no hay demanda. Por la parte que les toca, ¿cómo salir de esta situación?
Cepsa va a jugar un papel muy importante porque va a impulsar parte de ese ecosistema dando una solución 360 al cliente final en recarga ultrarrápida, tanto en el hogar como en carretera. Al mismo tiempo, acelerando esa entrada del vehículo eléctrico, porque al final es como la pescadilla que se muerde la cola. Necesitamos trabajar conjuntamente. Por ejemplo, nosotros, junto a Endesa, ya lo hacemos para instalar una amplia red de cargadores ultrarrápidos cada 200 km en las principales carreteras y corredores de España. El plan de despliegue es instalar unos 20 puntos de recarga por semana en las principales carreteras y todas las vías interurbanas, con el objetivo de tener la mayor red de recarga ultrarrápida en 2030 en toda España y Portugal.
P. ¿Cómo serán las electrolineras? ¿Cómo atraer a los usuarios que tendrán que esperar 20-30 minutos en recargar sus vehículos?
R. Van a tener otro concepto, será como esa sala VIP de los aeropuertos, que es un sitio donde quieres estar, te tomas algo y estás tranquilamente esperando tu avión. Darle esa experiencia al cliente donde tú puedas hacer parte de tu compra, recoger paquetes, ofrecer una variedad gastronómica, parafarmacia... Servicios para hacer la vida más fácil, porque tener 15-20 minutos del tiempo del cliente es un lujo. Pero también para toda la parte de transporte pesado, donde vamos a tener la capacidad de dar otros nuevos servicios.
En enero, Carmen de Pablo asumió el cargo procedente de Gestamp, con el objetivo de “maximizar los retornos para nuestros accionistas” y de impulsar la transformación sostenible de Cepsa desde una nueva dirección financiera que incluye también las funciones de Estrategia y ESG (Environmental, Social and Governance).