CaixaBank gana 707 millones tras reconocer un impacto de 214 millones por la guerra

CaixaBank se desmarca del sector. La entidad catalana, que cae un 1% en bolsa este viernes, se ha convertido en la primera en reconocer un potencial impacto derivado de la crisis de la guerra de Ucrania. Ha decidido reservar un fondo de 214 millones que debería cubrir el daño que originará el nuevo escenario macroeconómico, con la inflación y los costes de la energía disparados.

El grupo presidido por José Ignacio Goririgolzarri no ha tenido que realizar provisiones para ello, sino que ha movido dotaciones prudenciales realizadas en 2020 por el covid.

El banco catalán lo ha anunciado en la presentación de resultados del primer trimestre, periodo en el que ganó 707 millones, un 21,9% más que hace un año. Es un resultado 'ficticio' —proforma—, ya que la fusión con Bankia se cerró a finales de marzo del año pasado, y eso trastoca toda la comparativa. Lo que ha hecho la entidad es proyectar las cifras como si Bankia hubiera sido parte del grupo desde comienzos de 2021.

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La comparativa es todavía más compleja teniendo en cuenta el 'badwill' (fondo de comercio negativo) que generó la fusión el año pasado, según el cual CaixaBank ganó 4.785 millones de euros el año pasado. Sin embargo, el 'badwill' es un efecto contable, que no entra en caja ni se puede repartir vía dividendos, por lo que el grupo prefiere obviarlo.

Más allá de estos puntos, los resultados de CaixaBank reflejan todavía una caída del margen de intereses considerable, del 5,4%, que se ve compensada por las comisiones netas y el resultado de operaciones financieras (ROF). La mejora del 21,9% la generan los menores costes (-4,3%) por el ERE del año pasado y la caída de las provisiones (-23%).

Actividad

Gortázar señala que, “después de haber completado prácticamente el 90% de las integraciones de oficinas y de las salidas de empleados previstas, podemos focalizarnos cada vez más en el crecimiento del negocio”.

Así, la nueva producción de hipotecas y crédito al consumo en España mejoró un 14% y 18% interanual, respectivamente, con 2.122 millones de euros en hipotecas concedidas, tras un mes de marzo de fuerte actividad.