La Audiencia absuelve a los acusados por la venta de pisos públicos del Gobierno de Botella

La Audiencia Provincial de Madrid ha fallado absolver a los dos acusados por la venta de 1.860 viviendas propiedad del Ayuntamiento de la capital que el Consistorio, entonces dirigido por Ana Botella, vendió al fondo Blackstone en el año 2013.

Con esta sentencia del pasado 28 de enero, y a la que ha tenido acceso este medio, la sección quinta de la Audiencia respalda la posición que ya defendió el Ministerio Fiscal, en sus conclusiones definitivas, cuando solicitó la libre absolución de los dos únicos acusados.

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Se trata de Fermín Oslé, ex consejero delegado de la Empresa Municipal de Vivienda y Suelo de Madrid (EMVS), y Alfonso Benavides, apoderado de Fidere, sociedad bajo la cual Blackstone aglutinó estos pisos.

Ambos se enfrentaban a una condena por "prevaricación, malversación, fraude y sustitución de cosa propia a su utilidad social" por una de las operaciones inmobiliarias más relevantes y politizadas de la última década.

El Ministerio Fiscal, en sus conclusiones, ya había solicitado la libre absolución de los acusados

También la acusación particular ejercida en nombre de la EMVS modificó sus conclusiones provisionales para retirar la acción tanto penal como civil que venía sosteniendo frente a los dos acusados, para quienes terminó solicitando la libre absolución.

En cambio, las acusaciones particulares ejercidas por el PSOE en el Ayuntamiento de Madrid y por la Asociación de Afectados por la venta de vivienda por la EMVS mantuvieron su calificación de los hechos como constitutivos de los citados delitos y pidieron penas que llegaban hasta los ocho años de cárcel.

La Audiencia, que tampoco ha identificado mala fe por parte de las acusaciones, ha declarado de oficio las costas procesales en una sentencia contra la que cabe interponer recurso de casación ante el Tribunal Supremo.

Historia de un proceso polémico

La sentencia de la Audiencia Provincial llega casi 10 años después de que se llevara la operación de venta ahora investigada y tras un mediático camino judicial de ida y vuelta.

En 2018, el Tribunal de Cuentas condenó a la exalcaldesa Ana Botella y a siete miembros de su Gobierno a pagar 25,7 millones de euros por la venta de pisos públicos a Blackstone por 128,5 millones de euros.

Esta operación consistió en el traspaso de más de 5.000 inmuebles (1.860 viviendas, 1.797 plazas de garaje y 1.569 trasteros, más otros 89 elementos no vinculados a las mercantiles) a Fidere Vivienda SLU y Fidere Gestión SLU, sociedades de Blackstone.

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Sin embargo, siete meses después, revocó la decisión al considerar que, al hacerse mediante concurso público, no podía apreciarse "negligencia grave" en la gestión de Botella. En 2020, el Supremo confirmó su absolución.

En enero de 2019, el Juzgado de Instrucción número 38 también archivó el caso, al considerar que "no existen elementos suficientes" para procesar a nadie, pero, cuatro meses después, la sección 30 de la Audiencia Provincial le ordenó reabrirlo con Benavides y Oslé como únicos acusados.

El auto de apertura de juicio oral se dictó en junio de 2019, pero no fue hasta el pasado noviembre cuando arrancó la vista oral, juicio tras el que la Audiencia ha concluido la absolución de los dos acusados.