La arteria logística de Zara en el mundo firma la paz con su plantilla tras un año de tensión

No hay Zara sin Zaragoza. La capital aragonesa alberga uno de los centros logísticos más importantes de Inditex, el conocido como Plataforma Europa. Desde este centro, trabaja en turnos de día y noche una plantilla de casi 1.500 empleados para gestionar el almacenamiento y envío a todo el mundo de las prendas de la marca Zara Woman, principal enseña del grupo textil. Según datos del sindicato, la planta mueve unos 400 millones de prendas al año, más de la mitad de la marca.

Plataforma Europa lleva operando desde 2003 como armario de Inditex. Ha visto el grupo crecer desde la venta puramente en tienda al comercio integrado con el ‘online’. Sin embargo, en un momento tan crucial para la logística como ha sido la pandemia, los trabajadores afrontaban el desafío del nuevo convenio colectivo. Unas duras negociaciones que se han desarrollado a lo largo del último año y que han llegado a desembocar en los primeros paros de la historia de la base. Tras las tensiones, los trabajadores votaron finalmente el acuerdo esta semana, apostando por la rebaja de horas a cambio de una menor subida salarial.

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Cuando las negociaciones empezaron a principios de año, Inditex venía de cerrar un ejercicio con el beneficio un 70% por debajo del de 2019, en los 1.106 millones de euros. Las reuniones entre la compañía y la representación de los trabajadores, formada por OSTA, CGT, CCOO y Fetico, empezaron a estancarse por las diferencias entre las expectativas de las condiciones y la disposición de la empresa a cumplirlas, según distintas fuentes sindicales. No en vano, con la reapertura paulatina de las tiendas, Inditex volvió a recuperar los niveles previos a la pandemia en verano, apuntando ya al trimestre finalizado en octubre, cuando firmó un beneficio récord.

Además, Inditex anunció en septiembre una inversión de 80 millones en la ampliación de sus instalaciones en el centro, con la contratación de 250 empleos directos nuevos, adquisición de nuevas parcelas y tecnología logística. "Una apuesta por el centro que no casaba con la reticencia a mejorar las condiciones según lo esperado por los trabajadores", explica el representante de Confederación Sindical Independiente de Fetico.

Las tensiones culminaron a finales de noviembre, cuando gran parte de los trabajadores secundó los primeros paros de actividad de la historia del centro. Desde el 18 de noviembre hasta el día 20 del mismo mes, se encadenaron distintos paros productivos que alcanzaron un seguimiento cercano al 90%, según fuentes sindicales. Una vez activado este mecanismo de presión, los trabajadores volvieron a sentarse a la mesa de negociación con la compañía, hasta desembocar esta semana en el preacuerdo final, que estará vigente para 2021, 2022 y 2023. La empresa tendrá que desembolsar ahora las subidas salariales correspondientes a este año.

Tras ratificar con una aceptación de en torno al 70% el preacuerdo laboral, los trabajadores tenían entonces que decantarse por una de las dos opciones: o bien una subida salarial del 10,3% y reducción anual de 16 horas o bien una subida del 6,7% con una rebaja de 22 horas en 2022 y 32 horas en 2023 —cuatro días de trabajo menos al año—. Debido a los ajustes por exceso de jornada en turnos de nocturnidad u otras franjas especiales, desde la representación laboral de la empresa explican que esto supone que los trabajadores podrán llegar a tener semanas de cuatro días durante cinco meses al año. El nuevo convenio también viene con garantía del IPC acumulado y promesas de integrar a cierto número de trabajadores temporales a la plantilla.

Es cierto que estas subidas salariales son menores que las planteadas en otras bases como el ejemplo de la principal de Galicia, la última en firmar su convenio, con un alza del 14%. Sin embargo, hay que tener en cuenta que cada centro tiene bases salariales distintas (en el caso de esta comparable, por ejemplo, el salario medio es menor), además de distintos niveles de infraestructura y, por ende, carga laboral.

La gota que colmó el vaso fue la inversión de 80 millones para el centro

Plataforma Europa es un engranaje central dentro de la red logística de Inditex, ya que Zara supuso (contando a Kids y Home) el 70% de los ingresos totales del grupo a cierre de 2020. La base envía a todo el mundo y está conectada con 12 empresas de transporte. Este fue el primer centro que implementó un cuarto turno de trabajo para abrir también en fin de semana para dar servicio prácticamente todos los días del año. De hecho, el centro es un fuerte contribuyente a la actividad logística de Zaragoza, cuyo aeropuerto superó hace una década a Barcelona como el segundo de España con más toneladas de carga transportadas.

Inditex tiene todos sus centros logísticos en España, cerca de las sedes de sus ocho marcas. Aparte de la base en Arteixo (A Coruña), Zara también cuenta con las operaciones de Home y Kids en Meco (Madrid). En Galicia, el armario de Narón está dirigido a Pull & Bear. En Cabanillas del Campo (Guadalajara), Inditex también almacena la ropa de Pull & Bear, mientras que en Onzonilla (León) tiene a Zara Man y algunos mercados de Woman. En Elche (Alicante) tiene un centro logístico por el que pasan sus zapatos. Cataluña es la comunidad autónoma con más centros logísticos: Palafolls es para Bershka, Sallent para Stradivarius y Tordera para Massimo Dutti y Oysho.