La opa del dueño de Twitter por Afterpay (25.500 M), pendiente del OK del BdE

Square no logra cerrar la compra de la empresa de tecnología financiera Afterpay. De hecho, la compañía australiana, dueña de Clearpay, ha retrasado la junta con sus accionistas para aprobar su compra por 29.000 millones de dólares (25.500 millones de euros) tras la oferta lanzada por la cotizada dirigida por Jack Dorsey, que espera el visto bueno del regulador español.

Ambas compañías han reaccionado con caídas en bolsa al retraso de la reunión con sus accionistas. Afterpay cayó este miércoles un 6,2% en Wall Street y más de un 6% este jueves en la Bolsa de Australia. Por su parte, Square se dejó un 6,64% ayer en el parqué estadounidense y a la apertura de este jueves se deja en torno a un 2,6%.

La reunión de Afterpay con sus accionistas estaba programada para el 6 de diciembre, pero la cotizada dijo que probablemente la pospusiera para el año que viene, puesto que se prevé que Square, ahora rebautizada como Block Inc, no obtenga el visto bueno del Banco de España hasta el mes de enero. Fuentes conocedoras de la situación aseguran que los interesados no realizaron la solicitud formal hasta bien entrado noviembre, lo que retrasa a febrero el plazo máximo para dar una respuesta.

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La australiana ha destacado que es poco probable que la demora en el proceso de compra afecte a que se culmine con éxito la transacción, programada para el primer trimestre de 2022.

Jack Dorsey, cofundador de Twitter, está viviendo una vorágine durante los últimos días. El directivo de la red social anunció que dejaba su cargo de CEO en la plataforma y nombró a su sucesor, el ingeniero de origen indio Parag Agrawal. "Quiero que todos sepáis que esta ha sido mi decisión y me pertenece. Ha sido una opción muy dura, por supuesto. Amo a esta compañía... y a todos vosotros. Estoy muy triste... y a la vez muy contento", asegura Dorsey en su comunicado. ¿El motivo de su adiós? "Cambiar el curso de esta compañía a mejor", asegura. Su objetivo con Square es dar otra dimensión a la compañía más allá de su negocio de pagos y apostar por nuevas tecnologías como el 'blockchain'.