Las nuevas 'startups' que cambiarán el mundo tienen impacto social

Una aplicación que conecta el medio rural con el urbano a través de las gallinas y el internet de las cosas; unas gafas de realidad virtual para reducir la ansiedad de los niños ante una intervención hospitalaria y un espacio común para que Administraciones, ciudadanía y empresas trabajen de la mano para cumplir los Objetivos de Desarrollo Sostenible. Son los tres proyectos seleccionados en la primera edición del programa de aceleración Cellnex Bridge, nacido para impulsar iniciativas innovadoras que reduzcan las brechas digitales, sociales y territoriales.

La inversión en impacto es una tendencia en auge a escala global por parte de empresas, 'business angels' (personas que invierten en empresas en su fase inicial) y 'family offices'. En España creció un 26% durante 2020, hasta alcanzar los 536 millones de euros, según el último informe del Consejo Asesor Nacional para la Inversión de Impacto (SpainNab) y este 2021 el sector sigue creciendo. Gracias al reconocimiento de la Fundación Cellnex, impulsada por Cellnex Telecom, estas tres ‘startups’ recibirán mentoría y soporte económico de hasta 15.000 euros para desarrollar su producto o servicio a lo largo de 12 semanas.

“En los últimos tiempos, y sobre todo a partir de la crisis ocasionada por el covid-19, vimos cómo la falta de conocimiento o de acceso a las nuevas tecnologías generaba desigualdad de oportunidades”, expone Àngels Ucero, directora de la Fundación Cellnex. Para Lluís Deulofeu, su presidente, esta iniciativa pretende poner la tecnología al servicio de las personas para tender puentes que las unan y luchar contra la brecha digital, “por eso es necesario promover una conectividad universal significativa, hacer que esta llegue a toda la población, en una combinación adecuada de calidad de conexión y acceso a dispositivos”.

¿Qué tienen de particular las ‘startups’ Voluta.coop, Nixi for Children y eAgora para haber sido seleccionadas entre más de 50 candidaturas? Se ha valorado la calidad de los proyectos, todos con ideas potentes y propuestas de valor vinculadas a ámbitos como la educación, la atención a personas vulnerables, el impulso de las zonas rurales y la sostenibilidad y ligadas a la tecnología y la conectividad, para que nadie quede desconectado de una sociedad cada vez más digitalizada.

Del mundo rural a los temores infantiles

Así, Voluta.coop ofrece formación para los que quieren reconectar con el medio rural, por ejemplo, a través de talleres de bricolaje o agricultura regenerativa y autoconsumo o terapia ocupacional. Un gallinero es el punto de encuentro, donde aprender más sobre estos animales y su importancia como fuente de biodiversidad terrestre y de patrimonio etnológico. La 'startup' también quiere encaminar al entorno rural hacia la formación tecnológica para que supere las brechas y diversifique su ‘modus vivendi’, más allá de agricultura, la ganadería o el turismo.

Nixi for Children quiere acompañar a los niños/as y a sus familias durante el proceso de preparación para un ingreso en el hospital. Gracias a un kit que incluye unas gafas con experiencias de realidad virtual, estos pueden familiarizarse con las situaciones que se van a encontrar de manera cercana y divertida, con lo que pierden el miedo, aumenta la satisfacción de las familias y los hospitales se humanizan.

Por último, eAgora es una aplicación que conecta a todos los agentes de un territorio (ciudadanía, tercer sector, sector privado y Administración pública) para crear una red de municipios donde se transfieran conocimientos y soluciones para desplegar la agenda 2030. Una de las piezas estrella de este proyecto son los ‘Labs’, grupos de trabajo multidisciplinarios que, utilizando la gamificación, buscan resolver problemas reales en su pueblo o ciudad, como salir a limpiar el bosque o votar por mejoras en el barrio.

El programa de aceleración del que van a disfrutar estas tres ‘startups’ se basa en el acompañamiento por parte de un grupo de mentores, procedentes de diferentes áreas, de la plataforma AticcoLab y de la consultora en innovación social Innuba, que colaboran en el proyecto. Asimismo, por expertos de Cellnex seleccionados específicamente para cada ‘startup’. La mentoría, centrada en el desarrollo de una prueba de concepto, incluye formación en varios ámbitos del negocio, desde elaborar un plan financiero a la estrategia de comunicación, el plan de inversión o el desarrollo personal y colectivo.