La polémica por la puerta giratoria del BEI e Iberdrola llega al pleno de la Eurocámara

Werner Hoyer, presidente del Banco Europeo de Inversiones (BEI), ha calificado de “ataques” las críticas que Emma Navarro, la que hasta octubre de 2020 fuera vicepresidenta de la institución, ha recibido tras su fichaje por la energética Iberdrola solamente tres meses después de abandonar el cargo. Hoyer ha asegurado que esos “ataques” son “injustos” y ha pedido esperar hasta que la defensora del pueblo haya concluido sus investigaciones.

Hoyer ha recibido varias críticas por la gestión del caso Navarro. A los siempre combativos ecologistas se han sumado otras voces este lunes por la tarde, como por ejemplo la de Luis Garicano, eurodiputado de Ciudadanos, que ha criticado un “evidente” conflicto de intereses. “Esta vicepresidenta estaba a cargo de los préstamos a España y, en particular, a Iberdrola, uno de los principales clientes del Banco. En las ruedas de prensa que anuncian estos préstamos, aparece hombro con hombro la señora Navarro con el presidente de Iberdrola, para el que ahora trabaja. Señor Hoyer, las instituciones tienen que ser limpias y parecerlo”, ha criticado Garicano.

El viernes 25 de junio, la defensora del pueblo de la Unión Europea, Emily O’Reilly, anunció que abría una investigación en profundidad para determinar si el BEI había cumplido con su código ético al permitir que Navarro fichara por la empresa dentro del llamado “periodo de enfriamiento” o de “incompatibilidad”, 12 meses durante los cuales los antiguos cargos deben solicitar permiso al Comité Ético de la institución. Se trata de una medida para evitar los casos de “puertas giratorias”, aunque eurodiputados y ONG critican que esas normas son demasiado laxas y cumplen únicamente una misión cosmética. Hoyer ha pedido esperar a que el 'ombudsman' europeo remita las conclusiones de su investigación.

El BEI tiene hasta el 15 de octubre para responder a una serie de preguntas que la defensora del pueblo ha planteado a la institución

“El Comité de Ética y Cumplimiento del BEI no tuvo objeciones a su nombramiento para el cargo mencionado anteriormente, sujeto a su compromiso de abstenerse de cualquier relación con el Grupo BEI y sus órganos de gobierno durante el ‘periodo de reflexión’ de 12 meses”, explicaron entonces fuentes de la institución a El Confidencial. Pero esas explicaciones no convencieron ni a muchos activistas ni tampoco a algunos eurodiputados. El catalán Ernest Urtasun, de En Comú Podem, y su compañero ecologista alemán Sven Giegold fueron los que acabaron por elevar el asunto hasta la oficina de O’Reilly a través de una carta en la que le pedían que investigara el asunto. Ahora el BEI tiene hasta el 15 de octubre para responder a una serie de preguntas que la defensora del pueblo ha planteado a la institución.

“Me tomo muy, muy en serio las frases que he escuchado”, ha señalado Hoyer ante el pleno del Parlamento Europeo reunido en Estrasburgo por segunda vez desde el inicio de la pandemia. “Pero tengo que proteger a mi compañera que está siendo, bajo mi punto de vista, atacada de forma injusta”, ha criticado el presidente del BEI. “Hemos seguido las normas, y ella las ha seguido también, así que insisto, no lleguemos a conclusiones apresuradas antes de que el 'ombudsman' haya tomado posición, y espero que hayamos hecho lo correcto”, ha explicado.

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Navarro llegó a la institución en marzo de 2018, y durante su periodo como vicepresidenta del banco, que duró hasta el 16 de octubre de 2020, Iberdrola recibió financiación blanda por más de 1.200 millones de euros.