Esta empresa gallega ha creado un concurso de arte escolar a partir de restos de azulejos

La compañía familiar Suministros Lar celebra desde hace 15 años un certamen de murales que fomenta valores como la inclusión, la cooperación y el diálogo intergeneracional

a historia de Suministros Lar comienza con las primeras traídas de agua instaladas por la Costa da Morte, en el extremo oeste de la provincia de A Coruña. Y también en los depósitos de combustible que se construyeron en los puertos de la zona para abastecer el creciente tráfico de barcos. En muchas de estas obras trabajó Manuel Rodríguez, que decidió probar suerte en el mundo empresarial y en 1952 puso en marcha en la localidad de Corcubión su primera tienda de materiales de construcción. Casi 70 años después está a cargo de Lar su nieta, Tatiana Rodríguez. Hoy cuenta con 15 empleados y uno de los mayores centros de materiales de construcción en esta zona de Galicia, con 4.000 metros cuadrados de superficie. Lo consiguieron "trabajando y procurando prosperar", en todo este tiempo, resume Tatiana.

La primera tienda de Lar en Corcubión dio paso a otro almacén más grande en el casco urbano de Cee, y posteriormente la empresa abrió el centro de operaciones desde donde funciona hoy, situado en la entrada de esta localidad, al borde de la carretera que une la ciudad de A Coruña y el cabo Fisterra.

Uno de los materiales de construcción que más quebraderos de cabeza causaban a Lar eran los azulejos. "Llega un momento en que los muestrarios que tenemos expuestos para los clientes quedan descatalogados y hay que sustituirlos por unos nuevos. Teníamos que deshacernos de ellos y no encontrábamos salidas", expone Tatiana. De aquel inconveniente surgió una idea, inspirada por la técnica del trencadís que hizo mundialmente famosa Antonio Gaudí y que adorna muchas de sus obras: ¿y por qué no un concurso escolar para aprovechar estos restos, involucrando a la sociedad de la zona y, sobre todo, a las comunidades educativas? Así dio sus primeros pasos 'Lar na Escola' en el año 2006.

"El proyecto nació para darnos, además de su valor social, una solución sostenible: decidimos convertir los residuos de los restos de azulejos en arte para convocar un concurso de murales en los colegios e institutos de la zona", recuerda la gerente de Lar. "La primera edición nos dio muy buen resultado, porque los colegios lo recibieron muy bien", y dio pie a continuar una iniciativa que suma ya 15 años, más de 2.000 participantes, medio millón de piezas usadas y miles de horas de organización, colaboración y aprendizaje.

En aquel primer año, los murales se confeccionaron en las propias instalaciones de la empresa. Pero, posteriormente, se optó por una alternativa: trasladar los murales a cada uno de los centros participantes, introduciendo el concurso en la vida académica diaria y convirtiéndolo en un proyecto que involucraba a compañeros, familias y vecinos de los participantes.

“El proyecto nació para darnos, además de su valor social, una solución sostenible: decidimos convertir los residuos de los restos de azulejos en arte”

Cada año se elige una temática, siempre vinculada a la Costa da Morte: desde 2016 se han confeccionado obras de arte colectivas sobre el Camino Xacobeo a Santiago y Fisterra, los faros de la zona, los deportes acuáticos, las especies de mariscos o los juegos populares, con diversas formas y diseños adaptados a cada tema. Los equipos se documentan, preguntan a familiares y vecinos, aprenden la técnica de creación de los murales en las instalaciones de Lar y se ponen a trabajar. Alrededor del mes de mayo, después de casi todo un curso de preparación, presentan sus trabajos, acompañados de una memoria del proyecto redactada en gallego, castellano e inglés. El acto de entrega de premios reúne al jurado, compuesto por un equipo de expertos en arte, diseño y la temática de cada año. Lo que comenzó siendo un certamen escolar ya es hoy un acontecimiento social en esta región costera de Galicia.

Después del fallo del concurso, los murales de cada edición se exponen a lo largo de la costa gallega; cientos de miles de personas han visto las obras de 'Lar na Escola' en Sanxenxo, Camariñas, Cee, Corcubión, Ferrol o Fisterra, donde en pleno año Xacobeo se pueden contemplar los murales dedicados a los faros de la Costa da Morte. "Buscamos siempre cosas que nos representan; lo que queremos es recoger nuestra cultura y unirla con la sostenibilidad y la educación. Son tres patas muy importantes para nosotros, y que los que nos vengan a visitar puedan conocernos", resume Tatiana Rodríguez.

“Buscamos siempre cosas que nos representan; lo que queremos es recoger nuestra cultura y unirla con la sostenibilidad y la educación”

'Lar na Escola' se convierte, de esta manera, en un arma cargada de futuro y de valores: además de la apuesta por la educación no formal, la colaboración y el diálogo entre generaciones que brota de la confección de las obras, el concurso cuenta con la participación de asociaciones para la inclusión de personas con discapacidad. "Estamos muy satisfechos porque los participantes pueden conocer y llevar a cabo en su vida real lo que han aprendido; es algo muy importante. Porque aprender matemáticas, dos más dos, es una cosa; poder aplicarlo a la vida real como lo hacen en este proyecto, es otra. Esto es beneficioso para todos, lo hacemos porque nos gusta y porque es bueno para la sociedad, al fin y al cabo", dice la responsable de Suministros Lar.

La pandemia del covid-19 paralizó en 2020 el concurso, que iba a recoger en sus murales la historia de los naufragios de la Costa da Morte. Sin embargo, el proyecto se reanudará el próximo curso en cuanto, poco a poco, se recupere la 'normalidad'. Para ello, Lar cuenta con el apoyo de Banco Santander, un compañero de viaje de la empresa desde hace años. "Las colaboraciones que tenemos con ellos no son sólo comerciales, va más allá de lo que es un banco: siempre está ahí, pendiente de las empresas pequeñas, y nos ayuda en todo momento. Eso tiene que ver mucho con las personas, y en nuestro caso, las personas que nos asesoran desde el Santander, aquí en la oficina de Cee, están siempre ahí".