Ayuda británica y respaldo bursátil: así llega Pallete a la junta de accionistas de Telefónica
El primer ejecutivo de la operadora de telecomunicaciones se enfrenta a los accionistas con un prometedor arranque de año en bolsa y con la luz verde provisional a la fusión de O2
El próximo jueves José María Álvarez-Pallete tendrá que pasar su examen anual ante los accionistas. La junta de Telefónica, que será virtual por culpa del covid, es uno de los días marcados en rojo para el directivo que, sin embargo, llega este año con un puñado de buenas noticias debajo del brazo para garantizarse una jornada lo más placentera posible.
Los tenedores de títulos de la operadora tendrán que aprobar una serie de decisiones a propuesta de la directiva y, si todo marcha según lo previsto, lo normal es que la veintena de puntos más relevantes sean aprobados sin demasiadas complicaciones.
El punto clave para Pallete es el de su reelección para el consejo de administración. Los 'proxies', esas empresas independientes que se dedican a aconsejar a los accionistas el sentido de su voto en las juntas, no son unánimes, si bien señalan ciertos problemas a la hora de dar su beneplácito al primer ejecutivo de la compañía.
ISS y Proxinvest recomiendan votar 'no' en esta consulta, señalando que Pallete concentra los cargos de presidente y consejero delegado y que eso resta independencia al consejo. En su informe, ISS señala que el directivo "no ha detallado nunca ningún plan para separar los cargos de presidente y CEO". Glass Lewis, otro de los 'proxies', sí que pide el 'sí' para Pallete, pues considera que solo recomendaría lo contrario si "no se estuvieran implementando medidas para prevenir y controlar un potencial conflicto de interés que se derive de la combinación de ambos cargos", según un informe al que ha tenido acceso El Confidencial.
En cualquier caso, Pallete podrá poner en valor el buen año que lleva Telefónica, redondeado esta semana por la luz verde provisional para que se complete la fusión de O2, su filial británica, con Virgin Media. Es verdad que las autoridades de Competencia de Reino Unido todavía no han dado el visto bueno definitivo, pero todo apunta a que la operación se cerrará a mediados de este mismo año.
Para los analistas de Alantra se trata de una noticia positiva y muy relevante, considerando que la compañía resultante de la fusión, que estará valorada en unos 44.000 millones de euros, "tendrá una posición de mercado muy potente, con un rango de servicios mayor y unas perspectivas de crecimiento a corto plazo mejores que las de O2". Consideran además que Telefónica se refuerza en uno de sus cuatro mercados clave y además "servirá para reducir la deuda en unos 5.000 millones de euros, con un potencial de sinergias que podría alcanzar los 540 millones de libras anuales". Así, recomiendan a sus clientes comprar.
Reducir esos 5.000 millones de euros de deuda sería un gran paso adelante para Pallete, que en la última presentación de resultados de la compañía presentó una hoja de ruta por la que pasaba reducir este año en hasta 9.000 millones el pasivo, es decir, el 30% del total. Eliminar de un plumazo la mitad de esa cantidad puede considerarse una buena noticia.
A ese plan habría que sumar los 4.600 millones de euros de deuda que Telefónica pretende eliminar una vez se complete la venta de las torres de Telxius a American Towers, el gigante estadounidense que pagó 7.700 millones por los 30.722 emplazamientos que tenía en cartera Telxius. Está por ver la celeridad de los reguladores a la hora de dar luz verde a la adquisición, pues hay hasta seis países diferentes implicados, pero si todo va con normalidad podría estar cerrado este mismo año.
Arreón bursátil
Pallete podrá presumir de que el arranque de año en bolsa está siendo positivo. Es verdad que no son cifras como para gritarlas a los cuatro vientos, pero un avance de casi el 15% al cierre de la sesión de este viernes es una buena noticia viniendo de donde viene Telefónica. De hecho, la compañía cerró su mejor mes de enero en los últimos seis años.
Por comparar, en el mismo periodo del año pasado, es decir, entre el 1 de enero y el 16 de abril de 2020, las caídas alcanzaron el 35%. Además, no se puede atribuir ese desplome a la pandemia, pues entre el 1 de enero y el 10 de marzo de 2020, cuando todavía no se había decretado el confinamiento más duro, la compañía ya perdía un tercio de su valor.
De hecho, el pasado 5 de marzo Telefónica recuperó por fin el trono bursátil del sector de las telecomunicaciones, después de superar en capitalización a una Cellnex que le había arrebatado la posición de privilegio el 20 de julio. De nuevo, no es un logro por el que sacar pecho, pero sí devuelve algo de esperanza a una compañía que llegó a capitalizar más de 100.000 millones.
Con todo esto, lo cierto es que Pallete afronta una junta de accionistas que no debería darle muchos dolores de cabeza. La deuda y el valor de la acción han sido siempre los dos lunares de su gestión y parece que ambos lastres empiezan a reducir su peso en un 2021 que, bien es verdad, casi acaba de empezar.
El próximo jueves José María Álvarez-Pallete tendrá que pasar su examen anual ante los accionistas. La junta de Telefónica, que será virtual por culpa del covid, es uno de los días marcados en rojo para el directivo que, sin embargo, llega este año con un puñado de buenas noticias debajo del brazo para garantizarse una jornada lo más placentera posible.