Reyzábal se alía con la cadena L&H para abrir un hotel 'boutique' en los cines Callao

Paso al frente en medio de la crisis. Josué Reyzábal, dueño de los famosos cines Callao y miembro de una de las sagas empresariales más relevantes del Madrid del último siglo, ha firmado un acuerdo con la joven cadena L&H Hotels para abrir un establecimiento 'boutique' en el mismo edificio de la icónica sala de exhibiciones.

Aunque, a primera vista, el inmueble que hace chaflán entre la famosa plaza y la calle Jacometrezzo parece albergar en su totalidad los famosos cines, la realidad es que, en uno de sus extremos, hay un espacio destinado a oficinas que, después de años cerrado, a partir del próximo ejercicio aspira a albergar un hotel 'boutique' y una cafetería de dos plantas.

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"Con este movimiento, queremos consolidar todo el inmueble y apostar por la reactivación económica de Callao", ha asegurado Josué Reyzábal, para quien el futuro L&H será "un edificio del siglo XXI en medio de 100 años de historia". Esta operación ha estado asesorada por Torit Allocation.

El futuro hotel, y actual edificio de oficinas, forma parte de la misma finca registral que los cines, espacio que se reparte en planta baja y cinco alturas, todas ellas muy rectangulares, lo que facilita ahora el diseño de las habitaciones.

El acuerdo firmado con L&H contempla que el futuro hotel contará con 16 habitaciones y una suite, que ocupará la última planta y contará con 'jacuzzi' y solárium. Además, la primera planta y la baja estarán destinadas a una cafetería, reconciliándose así con su pasado, ya que este inmueble es conocido como La Calesera en honor a la cafetería que albergó durante tantos años.

Ahora, Reyzábal aspira a firmar con algún restaurador enfocado a un producto castizo, frente al carácter más urbano y cosmopolita del hotel. Al tratarse de un edificio centenario, la futura obra deberá respetar elementos como la fachada y la escalera, que se conservarán dentro del proyecto de reforma, con cambio de uso, que los dueños del inmueble empezarán ahora a tramitar.

Cambio de uso

En principio, al respetarse toda la actividad cultural de los cines y limitarse la reforma únicamente al espacio de oficinas y restauración, Reyzábal se muestra confiado en poder recibir en breve las autorizaciones requeridas, para así poder arrancar la obra en este primer semestre y abrir las puertas del nuevo hotel el año que viene.

"Nuestro objetivo es reactivar el edificio con una solución constructiva que respeta la fachada y todos los elementos necesarios, al tiempo que preservamos la cultura, porque Callao seguirá siendo un cine, que ahora se podrá beneficiar de sinergias con el hotel", explica el empresario.

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L&H Hotels es una joven cadena de establecimientos 'boutique' ubicados en el centro de Madrid, que ya cuenta con el L&H Gran Vía, situado en la calle San Onofre 5, a pocos metros de la Puerta del Sol, y el L&H La Latina, en la calle Calatrava 17.

Con este acuerdo, Josué Reyzábal confía en garantizar el doble reto de lograr la rentabilidad del inmueble y salvaguardar el carácter cultural de los cines Callao, una industria que lleva años en crisis y a la que el auge de las plataformas digitales, primero, y la pandemia, después, ha amenazado con enterrar.

Callao seguirá siendo un cine, pero ahora tendrá como vecinos a los clientes de L&H Hotels

Pero Callao cuenta con una ubicación única —"es la tercera plaza de toda Europa por la que pasa más gente", asegura Reyzábal—, singularidad que ha llevado al empresario en los últimos años a buscar fórmulas alternativas, como la instalación de grandes paneles luminosos o la celebración de la 'premier' de algunos de los grandes éxitos patrios de Netflix, como 'La Casa de Papel' o 'Élite'.

Con casi un siglo de historia a sus espaldas, el edificio que acoge el cine Callao es obra del arquitecto Luis Gutiérrez Soto y se inauguró el 11 de diciembre de 1926 con la película 'Luis Candelas', el bandido de Madrid. Tres años después, proyectó la primera película sonora y hablada que se estrenó en España: 'El cantante de jazz'.