Golpe a BBVA: la Audiencia permite a Béjar recuperar sus correos sobre Villarejo
La Sala de lo Penal contradice al juez García-Castellón y al segundo banco español, autorizando que el exdirectivo acceda a sus correos en el banco y en la Operación Chamartín
Tropezón de BBVA en la Audiencia Nacional. El banco presidido por Carlos Torres ha perdido la última batalla judicial contra su exdirectivo Antonio Béjar en el caso Villarejo. Tanto este como el banco llevan desde mediados de 2020 enfrascados en una guerra de recursos por sus correos electrónicos, en la que finalmente ha ganado Béjar.
El exdirector de Riesgos de BBVA España y expresidente de Distrito Castellana Norte (DCN) lleva meses quejándose de que la segunda entidad española no le deja acceder a sus antiguos correos tanto en el banco como en la inmobiliaria. BBVA consiguió que el juez que instruye el caso Villarejo, Manuel García-Castellón, le diera la razón y denegara la petición de Béjar. Sin embargo, la Sección Tercera de la Audiencia ha atendido el recurso del exdirectivo, en una sentencia del pasado 24 de febrero.
Esta batalla gira en torno a un debate jurídico: si BBVA, como imputada, podría dañar su derecho a defensa dando acceso a Béjar a sus correos, otro investigado en la causa. Hasta ahora, el juez García-Castellón había optado por una interpretación conservadora, para evitar que el banco pueda alegar que la causa se ha contaminado al forzarle a autoincriminarse. Sin embargo, la Sección Tercera de la Sala de lo Penal considera que el magistrado estaba desatendiendo el derecho a la defensa del exdirectivo por un potencial impacto en la de BBVA.
"En el presente caso, es evidente que, como sostiene el Ministerio Fiscal, nos encontramos en un supuesto de conflicto de derechos de defensa de dos personas investigadas", expone la sentencia. Esta continúa recordando que Béjar está imputado en el caso por material aportado por BBVA "con arreglo a criterios que -podemos razonablemente presumirlo- han estado guiados por su propio interés". Por ello, los magistrados creen que el exdirectivo tiene derecho a ver todos sus correos y defenderse del banco. Añade, además, que el secreto profesional de la entidad quedaría salvado realizando un expurgo de los documentos del correo de Béjar que no sean clave para la investigación.
Guerra de guerrillas
Detrás de este enfrentamiento legal está el que mantienen el banco y Béjar desde la el despido disciplinario de este a mediados de 2019. El exdirectivo considera que fue injusto señalándole como responsable de parte de la contratación de Villarejo durante varios años (2009-2013), cuando él solo siguió órdenes de la cúpula. De hecho, Béjar ha sido hasta ahora el investigado que más veces ha declarado ante el juez y los fiscales para colaborar con su punto de vista sobre el caso.
El banco y Béjar también estuvieron enfrentados en la justicia civil, tras una demanda por el despido, en la que finalmente decidieron sellar el despido a cambio de una indemnización de 1,7 millones.
En este contexto, el exdirectivo reclamó en julio de 2020 acceso a sus correos ante "la certeza de que existen correos electrónicos enviados por el Sr. Béjar o recibidos por este de otras personas, empleados, colaboradores o proveedores externos del BBVA, que no han sido aportados a la causa teniendo relación directa con esta, y que pueden ratificar todo lo que él ha declarado en sede judicial, de modo que son una fuente de prueba relevante que permitirá acreditar múltiples extremos, entre ellos, los procedimientos de pago [a Cenyt, la empresa de Villarejo]".
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