Nueva Pescanova capitaliza 542 millones euros y Abanca aumenta peso a 97%

La junta general extraordinaria de Nueva Pescanova ha aprobado este martes una capitalización voluntaria de su deuda, que asciende a 643 millones de euros, por valor de 542,2 millones.

En un comunicado, la multinacional gallega destaca que Abanca posibilita su sostenibilidad "a medio y largo plazo" al ser el principal acreedor que ha acudido a la capitalización de deuda, de modo que incrementa su participación en el accionariado de Nueva Pescanova del 80,46% al 97%.

Ese porcentaje podría variar en función de la participación del resto de acreedores en una ampliación de capital dineraria de un máximo de 50 millones, para lo que tienen 30 días de plazo a contar a partir de hoy.

Este tramo dinerario tiene como finalidad principal evitar la dilución de aquellos socios que no hayan acudido a la capitalización de la deuda. El consejo de administración de la compañía con sede en Chapela, en el municipio pontevedrés de Redondela, convocó la junta de hoy después de que el Juzgado de lo Mercantil 1 de Pontevedra dejara sin efecto la homologación del acuerdo de refinanciación con Abanca y otros acreedores al considerar que no se adoptó con las mayorías exigidas por la ley.

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Dicho acuerdo de financiación databa del 30 de junio de 2020, en el cual se preveía la conversión en capital de gran parte de la deuda de la compañía heredada tras el concurso de acreedores de Pescanova S.A. (conocida como Vieja Pescanova).

En 2017, ya había capitalizado el 35 % de la deuda de 1.000 millones de euros heredados del concurso de acreedores de la antigua Pescanova.

Nueva Pescanova recalca que la junta de accionistas de hoy es "el punto de partida para la superación de la mala situación financiera" que ha soportado desde su constitución en 2015, "lastrada por una deuda concursal heredada de la antigua Pescanova que, a pesar de haberse reducido, todavía ascendía a más de 600 millones de euros".

Su presidente, José María Benavent, asegura que "hoy renace el Grupo Nueva Pescanova. La compañía está saneada, con unos fondos propios robustos y con la capacidad de desarrollar su negocio sin el lastre que suponía la deuda anterior. Ahora podemos ya enfocarnos en la ejecución del plan de negocio hasta 2024 para crear valor y crecimiento de forma sostenible".