Nuevo 'rejonazo' a los accionistas de banca: un 13% menos de dividendo por los CoCos

Los inversores de la banca no ganan para disgustos. Tras casi un año 'castigados' sin dividendo por parte del Banco Central Europeo (BCE), el sector financiero iniciará en los próximos meses la vuelta a la normalidad en la retribución al accionista. El supervisor europeo va a permitir que algunas entidades repartan entre sus propietarios un 15% del beneficio de 2020 y, en algunos casos, el de 2019. Sin embargo, los accionistas tendrán que compartir este 15% con parte de los bonistas, por lo que el dinero que cobren se reducirá en un 13%.

Cuando el BCE levantó el veto a los dividendos, dejó claro que el 15% que se podrá pagar hasta septiembre sería sobre el beneficio operativo tras el pago de cupones AT1, los también conocidos como CoCos. Este efecto se produce cada año, aunque cuando las cantidades a distribuir son mayores, el efecto queda mucho más disimulado.

Las entidades pagan actualmente en torno a 1.280 millones de euros al año a los inversores de estos bonos. Estas emisiones son exigidas por la regulación europea para hacer frente a posibles escenarios de resolución, como le ocurrió a Popular. En tal caso, los accionistas y los dueños de los CoCos son los primeros en asumir pérdidas.

La presentación de resultados de los bancos arrancó la semana pasada y se extenderá durante febrero. Las previsiones del mercado apuntan a un beneficio operativo —excluidos deterioros de fondos de comercios— de cerca de 10.000 millones de euros. De acuerdo a las cifras del BCE, esto daría a las entidades el derecho de repartir unos 1.500 millones. Sin embargo, el impacto de los CoCos reduce en cerca de 200 millones el potencial dividendo a cuenta de los 'sufridos' inversores de la banca.

Bancos más afectados

La entidad más afectada por esta situación es Sabadell. El mercado prevé que el banco catalán gane este año unos 80 millones, cifra casi equivalente a los 74 millones que tendrá que compartir con los CoCos. Por ello, la entidad presidida por Josep Oliu ha decidido no dar dividendo en los próximos meses.

La segunda más impactada es Bankia, de la que estos cupones se comerían un 35% de su potencial dividendo. Sin embargo, la entidad nacionalizada retribuirá a sus accionistas una vez concluya la fusión con CaixaBank. Entre ambas, repartirán unos 190 millones en los próximos meses, 40 millones menos de los que podrían si no tuvieran emisiones AT1.

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Ó. Giménez J. Zuloaga

Los casos de Santander y BBVA son peculiares. La entidad presidida por Ana Botín hará oficiales la próxima semana unas pérdidas de entre 7.000 y 8.000 millones de euros. Aun así, el BCE ha decidido excluir los impactos de los fondos de comercio del cálculo para el dividendo, por lo que su beneficio operativo es el que se emplea para pagar dividendo. En el caso de Santander, la presidenta vaticinó un resultado de unos 5.000 millones. Con ello, el potencial dividendo tras el pago de 600 millones en cupones sería de 660 millones, o en torno a cuatro céntimos por acción.

En el caso de BBVA, el golpe por el deterioro del fondo de comercio fue de 2.084 millones en el trimestre. Sin este efecto y tras pagar 300 millones en cupones, la entidad presidida por Carlos Torres podrá repartir en torno a 400 millones.

Junto a estas entidades, Bankinter, Ibercaja y Abanca son los otros tres grupos con CoCos, que cuestan unos 20 millones al año a cada una. El primero ya ha anunciado que repartirá 45 millones a sus accionistas. Los otros dos todavía no han presentado resultados. La entidad aragonesa será más generosa, ya que podrá repartir también el resultado de 2019, que tiene congelado desde hace meses.