Cepsa encarga a JP Morgan la venta de sus bombonas de butano por 700 millones
La petrolera española, controlada por un fondo de Abu Dabi y por Carlyle, toma la primera medida para afrontar un año en que puede registrar graves pérdidas
Mubadala y Carlyle, los dos principales accionistas de Cepsa, empiezan a tomar medidas para corregir un año que se presenta muy difícil para la petrolera española. Según aseguran fuentes financieras, el fondo de Abu Dabi y el 'private equity' estadounidense han decidido poner a la venta el negocio de gas butano y propano en España, operación que está siendo coordinada por JP Morgan y por la que podría ingresar unos 700 millones de euros.
Fuentes oficiales de Cepsa han declinado hacer ningún comentario preciso sobre esta información, si bien han indicado que la compañía está en un proceso de revisión estratégica de sus activos, que podría derivar en la venta de algunas de sus filiales para concentrarse en otros negocios. Según fuentes financieras, la petrolera española con sede en Madrid, pero controlada desde el emirato de Oriente Medio, ya ha elevado la transacción al consejo de administración, por lo que JP Morgan ya tiene el mandato oficial de buscar compradores.
Cepsa engloba su filial de gases licuados, o GLP, como se conocen en el sector, en la división de Marketing, una de las cuatro grandes patas del grupo, junto a Exploración, Refino y Petroquímica. Marketing incluye las ventas a través de la red de estaciones de servicio, la comercialización de combustibles a través de canales mayoristas, la comercialización de biocombustibles, la comercialización de queroseno para el mercado de aviación, la venta de combustibles para embarcaciones (búnker), así como la venta de lubricantes, asfaltos y gases licuados del petróleo.
Durante el pasado año, Cepsa comercializó a través de estos canales 20,7 millones de toneladas, cifra un 6% inferior a la del mismo periodo del año anterior. La petrolera dispone de una red de 1.806 estaciones de servicio a 31 de diciembre de 2019, además de dos plantas de lubricantes, cinco de asfaltos y 11 de envasado de gases licuados del petróleo, y está presente en los principales aeropuertos y puertos españoles.
Fuentes financieras indican que Cepsa obtiene un resultado bruto próximo a los 65 millones por su negocio de gas butano y propano
La compañía no ofrece datos concretos del beneficio de explotación o ebitda del negocio de gas butano y propano. Pero fuentes financieras indican que obtiene un resultado bruto próximo a los 65 millones de euros, por lo que el valor de la filial, a falta de la actualización por los efectos del covid-19, puede estar próximo a los 700 millones.
Plan de acción
Marketing fue una de las dos unidades que registraron un crecimiento del ebitda en el primer trimestre del año, periodo en el que Cepsa perdió 556 millones de euros. Unos números rojos provocados por la provisión de 350 millones de los inventarios de crudo y productos petrolíferos y el deterioro de otros 188 millones de activos de exploración y producción por la caída del precio del petróleo. En total, 538 millones. Pese a ese entorno, Marketing obtuvo un ebtida de 122,31 millones, con una mejora de 32 millones entre enero y marzo.
Ante esta coyuntura, el consejo de administración de Cepsa decidió en mayo aplicar un duro ajuste que incluye un expediente de regulación temporal de empleo (ERTE) en su red de estaciones de servicio que afectará a 2.586 empleados; recortar las inversiones previstas para este año en un 20%, y a retrasar el pago de dividendo “hasta que haya una mejor visibilidad de la evolución de la crisis y su impacto en los mercados”.
Cepsa hará una actualización de la situación el próximo 30 de julio, día en que tiene previsto anunciar los resultados del primer semestre de 2020. Pero, en cualquier caso, la evolución de la petrolera está siendo todo un dolor de cabeza para Carlyle, que el pasado año adquirió casi el 40% del grupo español por unos 4.000 millones de euros. Una operación que valoró Cepsa en algo más de 10.000 millones, tasación que ahora podría reducirse en cerca de un 30% si se compara con la evolución de otras empresas del sector, como Repsol.
Mubadala y Carlyle, los dos principales accionistas de Cepsa, empiezan a tomar medidas para corregir un año que se presenta muy difícil para la petrolera española. Según aseguran fuentes financieras, el fondo de Abu Dabi y el 'private equity' estadounidense han decidido poner a la venta el negocio de gas butano y propano en España, operación que está siendo coordinada por JP Morgan y por la que podría ingresar unos 700 millones de euros.