AENA sigue con bronca: baja las tasas, pero mantiene los alquileres

La desescalada no ha traído tranquilidad para AENA. El gestor público de infraestructuras afronta este martes su consejo de administración con temas aún calientes encima de la mesa. Resuelto el tema de las tasas aeroportuarias, todavía colean los alquileres comerciales. Sobre todo cuando el argumento es el mismo: el impacto en su actividad comercial derivada de la caída del tránsito.

El contexto tampoco acompaña a la propia AENA. Según el equipo de análisis de Bankinter, sus estimaciones son que tendrá pérdidas superiores a los 100 millones de euros este año, nula generación de caja y cancelación del dividendo, para disgusto de sus accionistas, sobre todo de la pública Enaire, cuyo 51% del capital le genera vía retribución más del 80% de sus ingresos anuales.

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C. Hernanz

Antes que el 'holding' público —que en algún momento soñó con mantener el dividendo—, las voces más críticas han llegado por parte de las aerolíneas y de los operadores comerciales. El presidente Maurici Lucena ha tenido suficiente cintura para llegar a este consejo con el tema de las tasas aeroportuarias resuelto, como anunció hace una semana, consciente de la dimensión del problema.

Aunque la decisión sepa a poco a las aerolíneas. Al menos a los operadores comerciales (Autogrill, Areas…), a los cuales AENA sigue sin atender tras casi 100 días sin actividad y a las puertas ya de julio, mes a partir del cual se reanudan vuelos internacionales y nacionales, una apariencia de normalidad que puede frustrar sus expectativas de definir un nuevo marco.

Una carta sin respuesta

En previsión de esta situación, los operadores remitieron a Lucena una carta hace dos semanas para reclamarle la constitución de una mesa de trabajo, donde se negocie la construcción de un nuevo marco contractual que satisfaga a todas las partes, en aras de garantizar el mantenimiento del equilibrio económico de los contratos públicos relativos a restauración, hostelería y 'retail'.

De momento, nada de eso ha ocurrido. Este segmento representa cerca del 30% de los ingresos de AENA, por lo que una revisión a la baja afectaría a su ya estropeada cuenta de resultados por la crisis sanitaria del covid-19. Parece que hasta que Boston Consulting Group no analice y defina la estrategia de la actividad comercial de la red de aeropuertos, no se moverá un papel.