La banca pide evitar incertidumbre fiscal y asegurar la reactivación de la economía
Botín, Torres, Goirigolzarri y otros banqueros han pedido este lunes un pacto de calado para salvar a los sectores clave y hacer una reforma en educación que eleve la productividad
Los principales banqueros españoles han dejado sus mensajes clave en un evento organizado por la patronal CEOE. Los presidentes de algunos de los bancos más representativos han abogado por un pacto de Estado en favor de salvar a sectores económicos como el turismo o el automóvil, y para aprovechar la oportunidad que deja la crisis de cara a reformas que aseguren un crecimiento inclusivo con mayor productividad en el largo plazo, como en educación.
Ana Botín, Carlos, Torres, Jordi Gual, José Ignacio Goirigolzarri, Josep Oliu y José Luis Aguirre han participado en el evento ‘Empresas liderando el futuro’ que ha organizado la CEOE este lunes. “Hay tres fases de esta crisis: sobrevivir, una segunda hasta que haya vacuna y llegue a millones de personas, que puede durar entre 8 y 10 meses, y una tercera que es de renovación, para conseguir un crecimiento inclusivo”, ha señalado Ana Botín, presidenta de Banco Santander.
“He vivido muchas crisis en distintas geografías y esta es la más grave”, ha admitido la ejecutiva del grupo cántabro. “Es el mayor shock en el mundo en 100 años. Debemos preguntarnos prioridades, y mejores instrumentos para hacerlos posibles. La prioridad es mantener y generar empleo, evitar una destrucción permanente como la anterior crisis, y saber cuál es la política social óptima. Hemos sido capaces de responder mejor que en 2008, y en gran parte a los ERTE”, ha añadido.
Botín ha reclamado un diálogo social basado en la evidencia, los datos y el análisis de las consecuencias de las reformas en la inversión y el empleo. Entre todas las políticas disponibles, ha destacado dos: los ERTE, que “fueron el resultado de una negociación después de la crisis de 2008, agentes sociales y Gobierno, hoy nos ha salvado de un colapso social”, y actuaciones destinadas a “la revolución digital, el teletrabajo, la necesidad de cambiar modelos de negocio como en turismo, distribución o el sector financier”, así como “conseguir un sistema tributario del siglo XXI, un nuevo sistema educativo y planes industriales”. La presidenta de Banco Santander también ha pedido un programa de garantías públicas para el acceso de los jóvenes a la vivienda, que ayudaría a 500.000 familias y crearía “más de 1,7 millones de empleos en los próximos años”.
Su homólogo en BBVA, Carlos Torres, ha puesto el acento en “aprovechar los recursos ingentes puestos contra la crisis, algo histórico, para reparar el daño causado y para avanzar en los objetivos de desarrollo sostenible y digitalización de la economía”. Torres ha pedido rapidez a los programas europeos, así como avanzar en la Unión Bancaria y en la Unión del Mercado de Capitales.
Por su parte, el presidente de BBVA ha recordado que “es crítico preparar un futuro mejor, a través de los objetivos de desarrollo sostenible (ODS)”. Y ha puesto el foco en la educación: “España es uno de los países con mayor fracaso escolar, y es raíz de desigualdad de renta y social. La educación asegura igualdad de condiciones. El capital humano es la verdadera riqueza de las naciones. Debemos dirigir empleo a los sectores de futuro”. También ha pedido que, ante un escenario en el que previsiblemente la deuda superará el 115% del PIB, “se debe profundizar en el saneamiento de las cuentas, reduciendo el déficit estructural”.
En la misma línea, Jordi Gual, presidente de Caixabank, ha pedido que las políticas se encaminen a que “la recuperación gane tracción y se consolide”. “Hemos de encontrar un equilibrio razonable entre asegurar que no sufrimos nuevos episodios de posibles rebrotes del virus, y conseguir que la economía vuelva a funcionar”, ha apostillado.
En este sentido, ha recordado la importancia de Europa, con “un papel determinante, mucho más ágil y contundente” que tras la crisis de 2008. De hecho, ahora hay un “paquete presupuestario muy completo. Confío en que saldrá adelante antes del verano. No debe ser concebido como solidaridad, es necesario por interdependencias económicas. De estas saldremos todos juntos. Es importante para garantizar que se mantiene la unidad. Asimismo, el paquete es importante porque complementa a la unión monetaria”.
Desde Bankia, su presidente, José Ignacio Goirigolzarri, ha recordado la importancia de que la banca sea rentable, y que ya tenía problemas al respecto antes de esta crisis por los tipos negativos. “La capacidad de gestionar la crisis es nuestra responsabilidad, pero es contraproducente que se pidan esfuerzos adicionales en forma de impuestos u otras medidas que incidan en la rentabilidad. Si el sector no es rentable será un problema para toda la sociedad. Si no es rentable, los bancos no podrán obtener capital y dar financiación a las empresas y familias”.
Goirigolzarri cree que “el mayor reto es incrementar de forma sustancial nuestra productividad. Que las Administraciones creen un caldo de cultivo para atraer inversiones, con un esquema fiscal, educativo y creación de condiciones para promover inversión tanto nacional como extranjera”. Por ello, ha apostado por una reforma educativa que abarque la universidad y la formación profesional, afectando a todos los jóvenes y edades: “En este esfuerzo, son importantes las políticas activas de empleo. La formación es el mejor modo para impulsar el crecimiento y reducir desigualdades. Es un reto primordial para la sociedad española, el más importante que deberíamos proponernos”.
En el caso de Josep Oliu, presidente de Banco Sabadell, cree que aunque no se ha eliminado la amenaza del covid, “ya es una enfermedad con protocolos y prevención adecuados. En estos momentos es una responsabilidad de las autoridades cerrar incertidumbres sobre la economía, sustituyendo reglas de cierre de actividad por medidas de reactivación”.
“Hemos aprendido que la colaboración entre el sector público, la banca y las empresas es importante. La colaboración debe mantenerse, estamos al servicio de las autoridades para aportar nuestro conocimiento empresarial y ayudar a mantener el empleo”, ha señalado, al tiempo que ha pedido “buscar las fórmulas mediante las cuáles sectores importantes como el turismo y el automóvil puedan estar en plena normalidad cuanto antes”.
El presidente de Ibercaja, José Luis Aguirre, ha aplaudido las medidas adoptadas y el apoyo a la economía del Banco Central Europeo (BCE), que ha sido vital para contener las primas de riesgo, así como las medidas de flexibilización de capital. El objetivo de las autoridades debe ser, a su juicio, “restaurar la confianza, diagnosticando los problemas concretos de cada sector, y facilitar la financiación empresarial. Para la recuperación que se avecina son importantes el sector turístico, el sector alimentario, o la ingeniería. Y necesitamos que siga siendo de futuro el sector del automóvil, pero necesita una reconversión de su producción”. Para contribuir a ello, también ha pedido “favorecer una formación flexible y muy ligada a la educación”, así como favorecer el crecimiento de las empresas más valiosas y la exportación”.
Para la banca, ha pedido “preservar la solvencia del sistema bancario. Que tenga una fiscalidad homogénea al resto de países supervisados por el BCE; que a igualdad de estructuras de crédito y volumen, haya igualdad de exigencias de capital, porque hoy España está penalizada; defender la pluralidad bancaria, con grandes entidades multinacionales, y también entidades importantes en España, muy próximas al territorio”.
Los principales banqueros españoles han dejado sus mensajes clave en un evento organizado por la patronal CEOE. Los presidentes de algunos de los bancos más representativos han abogado por un pacto de Estado en favor de salvar a sectores económicos como el turismo o el automóvil, y para aprovechar la oportunidad que deja la crisis de cara a reformas que aseguren un crecimiento inclusivo con mayor productividad en el largo plazo, como en educación.