Apple sufre en bolsa por el hundimiento de las ventas del iPhone 11 en China

El nuevo iPhone no ha gustado en China. Las ventas de la última generación del teléfono de Apple han caído un 35% en noviembre y han provocado que el gigante de Cupertino se quede con una cuota de mercado que apenas supera el 5% en su segundo mercado más importante del mundo. Ninguna de las versiones del terminal, incluyendo el 'barato' iPhone 11, presentan cifras positivas.

Así lo asegura el analista de Credit Suisse Matthew Cabral, que cita a fuentes del Ministerio de Industria e Información Tecnológica de China. Tal y como explica el experto de la entidad suiza las ventas del 'smartphone' entre los meses de octubre y noviembre se han enfriado un 7,4% en términos interanuales.

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Esa caída ha provocado que las acciones de Apple retrocedan más de un 1% hasta el entorno de los 267,5 dólares. El descenso, que no parece especialmente significativo, sí que es relevante si tenemos en cuenta que Wall Street está disfrutando de una jornada de avances generalizados.

La nueva gama de terminales de Apple se puso a la venta en todo el mundo el pasado mes de septiembre, como viene siendo habitual para aprovechar el pico de ventas de la campaña de Navidad. Sin embargo, sorprendió la ausencia de las tradicionales colas en las Apple Store de todo el mundo con miles de fans tratando de ser los primeros en poner sus manos sobre las últimas creaciones 'designed in California'.

Por supuesto, la guerra comercial entre China y Estados Unidos está afectando decisivamente a las ventas del iPhone. La escalada de aranceles ha provocado que el Ejecutivo liderado por Xi Jinping haya impuesto un gravamen del 15% sobre los bienes tecnológicos que llevan bandera estadounidense. La resolución del conflicto mercantil parece más cerca tras las últimas palabras de Trump en las que aseguraba que "tanto China como nosotros queremos firmar un acuerdo", pero no sería la primera vez que tras declaraciones de ese tipo no hay ninguna acción concreta.

Apple ha pedido a Trump que retire los aranceles a ciertos componentes que trae de China para terminar de montar los iPhones, si bien el presidente estadounidense todavía no ha dado una respuesta clara. Tim Cook, CEO del gigante de Cupertino, sí que consiguió la exención para piezas del Mac Pro a cambio de mantener su ensamblaje final en suelo norteamericano.

En cualquier caso, parece difícil que Apple pueda recuperar terreno en China sin el impulso de una tecnología verdaderamente importante. De momento, este descenso en las ventas deja su cuota de mercado en suelo chino en el 5%, dos puntos porcentuales menos que en el trimestre anterior, y cada vez más lejos del 42% con el que reina Huawei según los datos de Canalys.

Cambio de esencia

Apple está en medio de un proceso para reducir la dependencia de la facturación del iPhone que tienen sus cuentas. Hace apenas dos ejercicios los ingresos procedentes de las ventas del teléfono superaban el 60% del total que llegaba a Cupertino, una cifra que ya está en su nivel más bajo desde el año 2012.

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Esta estrategia puesta en marcha por Tim Cook y Luca Maestri, el director financiero, estaba enfocada en convertir al fabricante en un proveedor de servicios. De ahí que se pusieron en marcha Apple News+, Apple Arcade o la ya popular Apple Tv+.

En el tercer trimestre del ejercicio fiscal de 2019 de Apple, el último del que tenemos cifras publicadas, la división de servicios facturó 11.500 millones de dólares, un número que para 2020 estará en el entorno de los 50.000 millones de dólares anuales el próximo año si se cumplen las previsiones de Tim Cook.