Calviño, Fainé y los 'tigres de papel' de Podemos

Hace poco más de un año, desde Palma de Mallorca, el financiero Isidre Fainé respaldaba la 'agenda de cambio' y los Presupuestos del nuevo Gobierno encabezado por Pedro Sánchez. Lo hacía ante la recién estrenada ministra de Economía, Nadia Calviño, en el congreso de directivos y ejecutivos que organiza anualmente el viejo factótum del ecosistema Caixa.

Un año después, nuestro país ha vivido cambios importantes, como la llegada al poder de Podemos, pero algunas cosas siguen estando vigentes: los Presupuestos siguen siendo los de Cristóbal Montoro y el referente en el Ejecutivo para el mundo corporativo sigue siendo Nadia Calviño, a la que en plena campaña electoral el líder del PSOE señaló como futura vicepresidenta.

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En más de una ocasión, el propio Sánchez ha demostrado su incomodidad a la hora de interactuar con los 'popes' del universo Ibex. Esas faenas han sido delegadas en la futura superministra, a quien todo el empresariado asume como su única y más valida interlocutora dentro del futuro gabinete, donde la presencia de Pablo Iglesias e Irene Montero ha metido el miedo en el cuerpo a más de uno.

Aunque algunos se han puesto en el peor de los escenarios, los más veteranos tienden a relativizarlo. En esas lides, el propio Fainé es un referente. De hecho, hace solo unas semanas, tras la convención del mismo foro, esta vez en Málaga, la junta directiva hizo balance días después ya con el resultado de las elecciones generales en la mesa. Y el 'jefe' prefirió contemporizar. 'Wait and see'.

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Muchas de las aspiraciones (legítimas) del ideario de Podemos pueden alarmar a esa tribu heterogénea del Ibex 35 o al oficialismo patronal de la CEOE. Sin embargo, buena parte confía en que la figura de Calviño impida llevar a cabo medidas alejadas del sentido común, que puedan comprometer de manera estructural las finanzas públicas y el tejido empresarial del país.

Desde el flanco socialista, trasladan al mundo corporativo que el fuego de Podemos quedará limitado por pura inercia de la maquinaria del sistema y por su propio convencimiento. Un integrante del Consejo de Ministros los describe como 'tigres de papel', en referencia al poco recorrido que tendrá su agresividad dentro del Gobierno. "No es lo mismo estar dentro que en la oposición".

La evolución de Alexis Tsipras como primer ministro de Grecia durante cuatro años, tras llegar al poder como líder de la izquierda radical de Syriza, es el ejemplo que ahora se expone desde los aledaños de Ferraz para calmar a los más inquietos. Habrá concesiones que pueda capitalizar Podemos, pero serán más sus 'cesiones'. Y en caso de peligro, está Calviño como último recurso.