La tierra empieza a temblar bajo los pies de Florentino Pérez por el proyecto Castor
En apenas dos semanas, la empresa se ha enfrentado a una demanda ante el Tribunal de Cuentas dirigida a evitar que prescriba el caso, y a un auto en su contra encausando a dos directivos
El otoño ha comenzado nublado para los intereses de ACS en la batalla judicial por el fallido proyecto Castor. Con apenas dos semanas de diferencia, el grupo de infraestructuras presidido por Florentino Pérez ha sufrido dos sismos que han hecho temblar la tierra bajo sus pies.
El primero hace referencia a la denuncia presentada ante la Fiscalía del Tribunal de Cuentas contra la decisión del Consejo de Ministros de abonar a la constructora los 1.350 millones de euros en que se ha cifrado la compensación por el fin del proyecto, según publicó 'El Mundo'.
Detrás de esta denuncia está la organización Xnet, famosa por haber sido una de los promotores del movimiento ciudadano que colaboró en sacar adelante el caso Bankia, que con esta nueva acción contra el grupo de Florentino Pérez ha buscado evitar que prescribiera el caso al cumplirse los cinco años de rigor.
A este primer temblor se unió este miércoles el provocado por el Juzgado de Primera Instancia número 4 de Vinaroz, que ha dictado un auto de procedimiento abreviado para encausar a dos de directivos de Escal, filial de ACS adjudicataria del proyecto, y a la propia empresa como persona jurídica, por delito ambiental.
En su escrito, el magistrado basa su decisión en que estos dos ejecutivos aprobaron iniciar la fase de inyección de gas entre el 2 y el 5 el de septiembre de 2013, a pesar de que eran “conscientes de la potencial peligrosidad sísmica que su actividad podría acarrear”.
El auto añade que esa primera actividad en el gasoducto provocó un aumento de la sismicidad que el Observatorio Sísmico del Ebro trasladó a la compañía, lo que no impidió que esta decidiera seguir inyectando gas.
Frente a esta decisión, el juez ha optado por exculpar a otros 10 investigados, todos ellos funcionarios del Estado, del delito de prevaricación medioambiental, decisión que estrecha el cerco solo sobre el grupo de Florentino Pérez a la hora de buscar responsabilidades de un proyecto que, además, terminó costando el doble de lo inicialmente previsto.
Fuentes conocedoras del proyecto, consultadas por El Confidencial, muestran su sorpresa por la doble vara de medir del juez de Vinaroz, especialmente porque, recuerda, fue el propio expresidente del Gobierno José Luis Rodríguez Zapatero quien calificó de estratégico este proyecto, y porque este solo podía salir adelante si el Ministerio de Fomento daba las bendiciones al proyecto medioambiental, como hizo.
Aumenta la tensión
Este nuevo giro de los acontecimientos llega después de varios capítulos que han ido subiendo la temperatura en torno al Castor, como la comisión de investigación abierta en el Parlament de Cataluña, que llevó al propio Pérez a tener que declarar, o el procedimiento que inició la CNMC (Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia) hace un año.
De hecho, la propia ACS reconoció la pasada primavera, en un folleto registrado en la Bolsa de Dublín por su programa de renta fija, que esta decisión del regulador podría terminar jugando en su contra, según desveló 'Vozpópuli'.
Una postura que rompe con el mensaje de tranquilidad que la empresa siempre ha querido transmitir respecto al impacto que puede terminar teniendo en sus cuentas el devenir del Castor, un proyecto que, a ojos de la constructora, también estaba llamado a ser todo un referente de su buen hacer, pero que ahora amenaza con jugar justo el papel contrario.
El otoño ha comenzado nublado para los intereses de ACS en la batalla judicial por el fallido proyecto Castor. Con apenas dos semanas de diferencia, el grupo de infraestructuras presidido por Florentino Pérez ha sufrido dos sismos que han hecho temblar la tierra bajo sus pies.