Trinitario Casanova torpedea a Merlin: anuncia demandas por Operación Chamartín

Estaba en la retaguardia y ha decidido pasar al ataque. El empresario Trinitario Casanova ha aprovechado el ruido creado en torno al interés de Merlin Properties por adquirir a BBVA su participación en Distrito Castellana Norte (DCN), la promotora de Operación Chamartín, para asomar la cabeza y recordar que él es el propietario, a través de Baraka Group, “de la práctica totalidad de los derechos de reversión correspondientes a dichos terrenos”.

En la primavera del año pasado, Casanova llegó a un acuerdo con la asociación No Abuso para adquirir el derecho de reversión a los propietarios originales, a los que el Estado expropió sus terrenos para hacer el desarrollo de la estación de Chamartín, con la idea de promover él mismo los 1,2 millones de metros cuadrados de este desarrollo.

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Estos terrenos son los que, ahora, Merlin aspira adquirir a BBVA, operación que el banco ha declinado confirmar y ante la que Casanova ha reaccionado rápidamente enviando sendos burofaxes a ambas partes, además de a DCN.

En estos escritos les requiere "que se abstengan de negociar la cesión de cualesquiera derechos en relación con el desarrollo urbanístico de los terrenos que integran el ámbito Madrid Nuevo Norte y, por supuesto, de dar comienzo a aquel desarrollo urbanístico".

Además, Baraka Capital Group, sociedad de Casanova, ha aprovechado este comunicado para adelantar que “en los próximos días se presentará la demanda en defensa de sus derechos en dicho proyecto”.

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La socimi Merlin, que actualmente está sondeando el mercado para lanzar una emisión de bonos a 15 años por 500 millones, cotiza por encima del 1% en una sesión marcada por su interés por entrar en el futuro centro de negocios de Operación Chamartín, ya que los terrenos que corresponden a BBVA acogerán, en su mayoría, oficinas.

Sin embargo, el banco todavía no es titular de estos suelos, sino que sigue siéndolo el Estado, a través del gestor ferroviario Adif, y lo seguirá siendo hasta que Ayuntamiento y Comunidad de Madrid completen todas las autorizaciones que permitan al banco ejecutar la compra.

En ese momento será cuando entren en juego los derechos de reversión adquiridos por Casanova, quien defiende, como antes hizo la asociación No Abuso, que este derecho es previo al cambio legal que le puso fecha de caducidad y, por tanto, exige que los terrenos vuelvan a sus dueños originales... o que el banco les compre su posición.