Glovo dispara ingresos hasta 52M (+268%), pero multiplica por ocho sus pérdidas

Glovo, la conocida aplicación de mensajería, cerró el año pasado con una facturación de 52,3 millones de euros, un 268% con respecto al año pasado. Un fuerte crecimiento impulsado por la expansión internacional de la firma que, sin embargo, todavía no se traduce en beneficios. A cierre de 2018, Glovo registra unas pérdidas de 45,7 millones frente a los 5,6 millones de 2017, lastrado principalmente por la fuerte inversión para expandirse internacionalmente (ya opera en 200 ciudades de 26 países) y el incremento de la plantilla (desde 108 a casi 300 empleados). Glovo confía en llegar a los beneficios entre 2019 y 2021 en los diferentes mercados en que está presente.

Según consta en las cuentas, la compañía fundada por Oscar Pierre disparó los gastos desde los 10,8 millones a los 82,6 millones en solo un año. Esto se debe al aumento de gasto en personal (de 3,4 millones a 13,8 millones) y, sobre todo, a los gastos de la partida "servicios exteriores", que ha pasado de 19,8 millones a 82,6 millones.

En esa partida se incluyen, entre otros gastos, la inversión en publicidad, que se ha disparado desde dos millones a 16,1 millones, y los pagos a los 'glovers' (repartidores), que han pasado de 13,5 millones a 45,7 millones. La documentación también recoge los pleitos que la compañía mantiene abiertos con los repartidores que han emprendido acciones legales para que se les reconozca una relación laboral.

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A este respecto, la compañía ya ha recibido tanto sentencias a favor (Madrid) como en contra (Vigo), y admite la incertidumbre legal que existe ante la falta de regulación. "A fecha de hoy, los asesores laborales no pueden estimar si dichos procedimientos concluirán a favor o en contra de la sociedad, y consideran como posible el riesgo, dada la ausencia de regulación legal y jurisprudencial. Los administradores consideran que se podrán resolver favorablemente en última instancia".

Según explica Pol Oliver, 'head of' Global Finance de Glovo, la compañía está "convencida de la legalidad del modelo" y defiende que la relación con los repartidores es de autónomos. En cuanto a las condiciones, señala que cada repartidor cobra, de media, unos ocho euros por hora trabajada. Un 'glover' que colabora 40 horas a la semana recibe unos 1.300 euros, un 20% más que el actual salario mínimo interprofesional.

Y este no es el único frente que tiene abierto Glovo, que también ha recibido la visita de los hombres de Hacienda por estos mismos motivos. Durante el primer trimestre del año, la 'startup' ha recibido varias actas de liquidación de la Seguridad Social por importe total de 5,5 millones de euros: 3,8 millones en Barcelona, un millón en Valencia, 380.000 euros en Zaragoza y 271.000 euros en Málaga. Glovo señala que llegará hasta la última instancia judicial posible para defenderse, y avisa de que dispone de "medidas alternativas" para adaptar el modelo de negocio "y garantizar su viabilidad futura" en caso de perder.

Abiertos a nuevas compras

Sobre posibles operaciones corporativas, Oliver tacha de "rumores" las informaciones que apuntan que negocian su venta a Uber o Deliveroo. "Tenemos relación con todos", zanja. También descarta una salida a bolsa a corto plazo.

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En lo que sí se muestra más abierto es en la posibilidad de adquirir otras compañías. Hace apenas un mes, Glovo anunció la compra de Pizza Portal a AmRest, el dueño de La Tagliatella. Pizza Portal es una aplicación de pedidos que opera en Polonia por la que Glovo ha desembolsado 30 millones de euros. Y podría no ser la última. "Siempre estamos abiertos a nuevas oportunidades".

La despedida de Brasil: 24,43 millones

Actualmente, Glovo está presente en 200 ciudades repartidas en 26 países. "2018 ha sido el año de la gran expansión", explica Oliver, que señala que ahora Glovo está en una fase más selectiva y que, por ahora, no hay ningún nuevo mercado sobre la mesa.

Sobre el cierre en Brasil, Oliver explica que fue una decisión estratégica al no ver un retorno claro de la inversión. Según consta en las cuentas, Glovo tiene provisionados 18,83 millones por este cierre y 5,6 millones extra "para hacer frente a los costes de cierre y al pago de los proveedores y acreedores de la filial. Los citados fondos han sido desembolsados durante los meses de enero y febrero del ejercicio 2019".