Sigue la huelga de Ryanair, pero con ningún vuelo cancelado (aún) para los días 6 y 8

En plena 'operación retorno' y tras la confirmación por parte de la empresa del cierre de cuatro bases de verano en España, tripulantes de cabina y pilotos de Ryanair han convocado varias jornadas de huelga durante diferentes días del mes de septiembre. Con la clausura de las bases de Girona, Tenerife Sur, Las Palmas y Lanzarote, más de medio millar de empleados de la compañía irlandesa podrían perder sus puestos de trabajo, razón por la cual continúan, a pesar de los esfuerzos de la aerolína por evitarlo, con los parones previstos. La aerolínea ha señalado en un comunicado público que espera que "todos los vuelos hacia o desde los aeropuertos de España" de los próximos dos días de huelga, 6 y 8 de septiembre, operen según lo previsto, es decir, que ninguno se vea cancelado por los paros.

Todo esto lo ha conseguido —y en palabras de la empresa—, por los "esfuerzos de la gran mayoría" de los empleados de cabina, que han confirmado que "trabajarán según lo establecido y no apoyarán esta lamentable huelga injsutificada de un pequeño número de tripulantes de cabina españoles". Durante los primeros dos días de paros, Ryanair confirmó que solo había cancelado 14 vuelos, seis para un sábado y ocho para un lunes, aunque no hizo público el listado de los mismos; en la misma comunicación, la aerolínea cargó contra los sindicatos españoles que convocaron las huelgas, que la propia empresa consideró "sin sentido", y los acusó de tener como único propósito la alteración de los planes de los viajes de los clientes de Ryanair, obviando que el cierre de sus cuatro bases españolas tendrá como consecuencia el despido de más de 500 personas.

En esta ocasión, Ryanair ha centrado su comunicado en "agradecer sinceramente" a los pilotos y tripulantes de cabina que no se han sumado a la huelga y que han confirmado que trabajarán para "proteger los vuelos y los planes de viaje" de los pasajeros. Asimismo, han insistido en llamar a conversaciones a los sindicatos, si bien dejan claro que el cierre de las cuatro bases es irrevocable, "por muchas huelgas sin sentido que convoquen".

Desde USO, uno de los sindicatos tras la huelga, acusan a la aerolínea por haber conseguido que el Ministerio de Fomento aprobara "una resolución de servicios mínimos mucho más restrictiva que cualquier otra aerolínea española", y la señala de notificar irregularmente a sus empleados y de programar diez veces más imaginarias —tripulantes de cabina de guardia en sala de firmas de la tripulación— que en un día normal, cuando Fomento establece que deben ser las mismas que las de un día normal.