Manzanares, fundador de Ayesa, cede el poder a su hijo antes de incorporar socios

Acuerdo salomónico en la cúpula de la ingeniería Ayesa, controlada por la familia sevillana Manzanares. El cofundador del grupo hace más de medio siglo, su presidente José Luis Manzanares Japón, ha dado un paso atrás y acordado con sus hijos el reparto de las funciones en la que es una de las grandes ingenierías españolas independientes con ingresos de 275 millones. El nuevo hombre fuerte del grupo es José Luis Manzanares Abásolo, hijo del presidente y que se convierte en el consejero delegado de todo el grupo. Su hermana Arantxa será la directora comercial del área de Tecnología, tarea para la que mantiene funciones ejecutivas, y adjunta al presidente, lo que equivale a una vicepresidencia. La sucesión queda así encarrilada antes de dar entrada a un nuevo socio, negociación que avanzó El Confidencial hace unos días.

El objetivo de esta decisión, tomada en el consejo de Ayesa Inversiones como sociedad matriz, es el de "reforzar la estructura presidencial adecuándola al inevitable paso de los años". Así se recoge en el comunicado enviado a la plantilla firmado por el propio Manzanares padre, de 78 años. También se pretende "ofrecer una imagen de empresa unificada" que integre bajo una sola batuta, la de José Luis hijo, la actividad fundacional de Ingeniería con la de Tecnología, hacia la que diversificó en 2011 con la compra de la mayoría de la entonces empresa pública Sadiel. Hasta ahora, José Luis y Arantxa venían dirigiendo respectivamente las áreas de ingeniería y tecnología como vicepresidentes, quedando el poder ejecutivo último en manos de su padre. En este sentido, Arantxa sustituirá en la presidencia a su padre cuando se presente el momento, según recoge la misiva y han confirmado fuentes de la propia compañía.

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Carlos Pizá. Sevilla

Por su parte, el nuevo CEO será también el máximo responsable de todo el área corporativa. Fuentes conocedoras del proceso señalan que Ayesa lanza una mensaje de implementación de medidas de buena gobernanza separando el poder ejecutivo de la figura del presidente. Hace un par de años ya incorporó al consejo de administración a dos independientes: José Sierra, exdirector de Deloitte en Andalucía y miembro independiente de múltiples consejos de firmas andaluzas; y Javier Benjumea, hijo del fundador de Abengoa. Las negociaciones para identificar un socio con el que impulsar el crecimiento involucran a compañías como Uría, Citi, The Boston Consulting Group y EY.

La relación entre los dos hijos del fundador ha sido tirante desde hace años, por lo que fuentes empresariales señalaron a este medio que el proceso de búsqueda de un socio estaría relacionado no sólo con la ambición de crecer, sino de encauzar la sucesión. Pero esta se ha producido antes de que ese proceso se cierre, lanzando el mensaje de que la gobernabilidad está clara llegue quien llegue al accionariado.

Ayesa, con sede en el parque científico Cartuja de Sevilla, obtiene la mitad de su negocio fuera de España y tiene un endeudamiento muy bajo. Debe 20 millones a la banca frente a un ebitda (beneficio bruto) de 24 millones sólo en 2018. Emplea a 4.500 personas en 40 países y el nuevo accionista que se incorpore será minoritario, ya que la familia quiere retener más de 50% del capital.