Verdú: "Las cuentas de Bankia fueron las más supervisadas de la historia"

Francisco Verdú, ex consejero delegado de Bankia, es uno de los daños colaterales del juicio por la salida a Bolsa. Llegó en junio de 2011 al banco entonces presidido por Rodrigo Rato, apenas un mes antes de la Oferta Pública de Suscripción (OPS). Pero como número dos le tocó firmar el folleto de la salida a Bolsa y por ello es uno de los principales acusados desde hace casi siete años.

Verdú ha defendido en el interrogatorio de la Fiscalía que cuando llegó estuvo completamente seguro de apoyar la OPS por que "las cuentas de Bankia fueron las más supervisadas de la historia", tras el 'examen' de Banco de España, CNMV, auditores y algunos de los principales bancos de inversión internacionales. "Firmo [el folleto] porque cuento con todas las bendiciones", ha añadido.

Cuando uno llega a un sitio se fía de la auditorái, no encarga una adicional"

"Cuando uno llega a un sitio se fía de la auditoría, no encarga que se realicen 2 millones de tasaciones y se revisen 1,5 millones de prestatarios. ¿Cómo no voy a creer al Banco de España, al Frob y la Autoridad Bancaria Europea [EBA, por sus siglas en inglés]?", ha explicado el acusado.

"Voy a seguir preguntándole sobre estas cuestiones aunque soy consciente de que no los vivió en primera persona, por darle la oportunidad de explicar qué supo a posteriori de ello", ha reconocido el fiscal Alejandro Luzón, mientras preguntaba por deterioros de Bankia que llegaron a través de Bancaja, como Banco de Valencia, un swap que provocó pérdidas millonarias y Martinsa Fadesa.

Señala a Rato

Verdú ha sido interrogado en profundidad sobre la determinación del precio de la salida a Bolsa, que según el fiscal provocó la "quiebra de BFA-Bankia". El acusado lo ha negado y ha defendido que el precio que logró Bankia fue bueno respecto a los descuentos con los que cotizaba toda la banca europea en aquel momento, por la crisis griega. En cualquier caso, se ha lavado las manos: "El presidente, tras reunirse con los bancos aseguradores, con Lazard, dio cuenta de las órdenes recibidas y decide que Bankia salga con ese precio".

El banquero también ha derivado responsabilidad al bufete Uría Menéndez y al gabinete de Presidencia de Rato, comandado en 2011 por Luis Maldonado, como coordinadores del folleto de la salida a Bolsa, externo e interno, respectivamente.

Luzón ha intensificado el interrogatorio en referencia a un derivado concedido a Gestamp en la salida a Bolsa, en el que interveno Verdú. El acusado aclaró que lo hizo en una reunión de 10 minutos a la que tuvo que acudir porque el responsable, Matías Amat, se prejubilaba.

Otro de los frentes del fiscal ha sido la política de refinanciaciones, que Verdú ha defendido. Luzón le ha leído un informe del Banco de España en el que se exponía que estaban mal contabilizadas y se estaba contabilizando mal la morosidad. El ex consejero delegado ha señalado desconocer estas conclusiones y ha cuestionado su credibilidad. "De haber sido cierto me hubiera preocupado muchísimo", expone, "mi responsabilidad era mejorar el negocio".

El exdirectivo ha dado una versión contradictoria sobre la ausencia de informes de auditoría de BFA y Bankia a los acusados que han declarado previamente. Ha reconocido problemas planteados por Deloitte con BFA y los ha negado con Bankia, aunque posteriormente ha reconocido que se preocupó en marzo-abril cuando se enteró que faltaba documentación por aporar a la auditora.