Los acusados de Bankia maniobran para evitar que los interrogue la Fiscalía

A río revuelto, ganancia de pescadores. Parte de los acusados del caso Bankia ha intentado aprovechar la baja médica de la fiscal Carmen Launa para librarse de un interrogatorio a fondo de Anticorrupción.

Así figura en una decena de escritos presentados ante la Audiencia Nacional durante los últimos días, en los que parte de los 30 procesados que no fueron inicialmente acusados por la Fiscalía proponen que se adelanten sus interrogatorios.

El primero en hacerlo fue el abogado Enrique Molina, representante de Alberto Ibáñez y José Manuel Serra, en un escrito presentado este miércoles. Respondía así a la petición del tribunal, que busca soluciones ante la baja de Launa —operada y sin fecha de vuelta todavía— y el ofrecimiento del fiscal jefe, Alejandro Luzón, de dedicarle él mismo una sesión en febrero. A la jueza Ángela Murillo le pareció insuficiente y por ello pidió opinión al resto de partes.

Rato propone que se ocupe del caso otro fiscal

Es aquí donde Molina sugiere el cambio de calendario: que primero declaren los 30 acusados que se acogieron a la doctrina Botín por no estar señalados por la Fiscalía, y que después acabe el interrogatorio a los cuatro principales procesados: Rodrigo Rato —que ya ha sido interrogado durante dos jornadas—, José Luis Olivas, Francisco Verdú y José Manuel Fernández Norniella.

El abogado de Ibáñez y Serra sostiene que así daría tiempo a que se recuperase la fiscal Launa, “pudiendo estar presente otro representante del Ministerio Público durante las sesiones de aquellos acusados contra los que no se dirige la acción pública o incluso pide el sobreseimiento”.

Aunque la Fiscalía solicitó que se archivara la causa para 30 de los procesados en su escrito de acusación, posteriormente abrió la puerta a imputarles un nuevo delito de falsedad documental.

Otras posiciones

Desde la acusación popular, la Confederación Intersindical de Crédito (CIC) se niega a esta petición: “Bajo ningún concepto cabe presuponer que la Fiscalía tenga un menor interés en la declaración (…) toda vez que solicitó su declaración como testigos”.

Posteriormente, se han ido añadiendo otras defensas a la petición de Molina, como la de Estanislao Rodríguez-Ponga, Antonio Tirado, Ángel Villanueva, José García-Fuster y Juan Manuel Suárez del Toro.

El resto de acusados ha optado por pedir que sea Luzón el que concluya los interrogatorios de los principales procesados —lo pide el propio Verdú— o que se designe directamente otro nuevo fiscal —Rato—, ya que “no cabe duda de que la alta cualificación y preparación de cualquiera de ellos garantiza la debida defensa de los intereses generales”.