Jordi Sevilla se perfila como presidente de la empresa pública Red Eléctrica

El exministro Jordi Sevilla se perfila como futuro presidente de Red Eléctrica de España (REE), una empresa de la que es accionista el Estado, según fuentes del sector. Sustituiría a José Folgado, que anteriormente fue alcalde de Tres Cantos. Sevilla está actualmente en la consultora Llorente y Cuenca y ha sido nombrado por la titular de Política Territorial y Función Pública, Meritxell Batet, presidente del grupo de expertos para modernizar la Administración. Sevilla no quiso hacer comentarios. REE es una empresa que cotiza en el Ibex y el Estado es el principal accionista con un 20% del capital, por lo que tradicionalmente nombra al presidente. El exministro podría entrar primero como consejero, paso previo necesario antes de alcanzar el principal puesto ejecutivo, aunque la decisión no está cerrada.

Ser presidente de REE es uno de los puestos más codiciados. José Folgado, que anteriormente fue secretario de Estado de Energía y alcalde de Tres Cantos, cobró 546.000 euros en 2017, según el informe de retribuciones de la empresa. El nombramiento tradicionalmente es del Estado, que posee un 20% de la empresa, aunque debe explicarlo y consensuarlo con los fondos de inversión que componen el accionariado, ya que la empresa cotiza en bolsa. En ese sentido, se busca un perfil técnico. Antes que Folgado fue presidente Luis Atienza, profesor de Económicas y exministro de Agricultura y secretario general de la Energía con Felipe González. Sevilla podría entrar como consejero en un primer paso para posteriormente pasar a la presidencia.

El exministro trabaja en Llorente y Cuenca y ha recibido el encargo de Batet de liderar el grupo de sabios para modernizar la Administración

Jordi Sevilla (Valencia, 1956) encajaría en ese perfil económico porque es funcionario del cuerpo de técnicos comerciales del Estado, el mismo que los exministros Luis de Guindos o José Manuel Soria. Además, fue ministro de Administraciones Públicas con José Luis Rodríguez Zapatero y ahora estaba encargado desde Llorente y Cuenca del grupo de sabios que debía modernizar el acceso a la función pública. Sevilla no quiso hacer declaraciones a este diario. El puesto es codiciado y otros nombres que han sonado eran José Blanco, que ha llevado en el Parlamento Europeo temas de energías renovables, y el exministro de Industria Miguel Sebastián.

Igual que ha ocurrido con Juanma Serrano, jefe de Gabinete con Pedro Sánchez y ahora recién nombrado al frente de Correos, el presidente del Gobierno confiaría en uno de sus más estrechos colaboradores durante su tortuoso periplo hasta llegar a Ferraz. No en vano, Sevilla fue uno de los integrantes de los dos comités de sabios que Sánchez montó para las elecciones generales de 2015 y 2016, y el coordinador del área económica de su programa. Desde entonces, pese a no contar con cargo en la ejecutiva federal, ejerció como portavoz oficioso para asuntos económicos.

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En las quinielas de ministrables

Además, el secretario general lo incluyó en el equipo que negoció su investidura fallida en febrero de 2016. Su perfil más liberal se interpretó como una señal del interés del líder por amarrar un pacto con Ciudadanos, como así sucedió. El propio exministro relató las bambalinas de aquel fracasado proceso negociador en su libro 'Vetos, pinzas y errores. ¿Por qué no fue posible un Gobierno del cambio?' (Deusto, 2017), en el que desveló que Sánchez llegó a plantearse la abstención para hacer posible la investidura de Mariano Rajoy, opción que luego desechó, y en el que describe su proceso de aislamiento respecto de su círculo de confianza, que él integraba.

La conexión de Sevilla con la causa de Pedro Sánchez ha sido siempre manifiesta. Renunció al partido tras el polémico comité federal que dio paso a la creación de una gestora presidida por Javier Fernández. No obstante, las relaciones con Sánchez se enfriaron. Sevilla fichó por Llorente y Cuenca y no se movilizó en las primarias a favor de ningún candidato. Cuando la moción de censura contra Rajoy triunfó, su nombre volvió a entrar en las quinielas como ministrable. Pero él ya había trasladado al presidente que no ambicionaba ninguna cartera, aunque sí estaba dispuesto a ayudarle en aquello que necesitara.

Sevilla formó parte de los comités de sabios para las generales que montó Sánchez e integró el equipo que negoció su investidura fallida en 2016

En REE hay tres consejeros propuestos por la SEPI que podrían cambiar antes que el presidente. Se trata de una funcionaria del Estado, Mercedes Real Rodrigálvarez, del expresidente de Aragón y exdiputado del PP Santiago Lanzuela y del economista Fernando Fernández. La salida de estos dos últimos, que percibieron 175.000 euros el año pasado, puede ser previa al previsible nombramiento de Jordi Sevilla. Otros consejeros independientes también proceden de la política, como el ex director general de la Guardia Civil Arsenio Fernández de Mesa, que percibió 156.000 euros. Antes que él, fue consejera la exministra socialista Ángeles Amador, que estuvo 12 años en el cargo y en su último ejercicio completo, 2016, percibió 175.000 euros. En 2012, nada más llegar el PP al poder, la SEPI propuso al marido de María Dolores de Cospedal, Ignacio López del Hierro, como consejero, pero el escándalo hizo que desistiera.

Según fuentes socialistas, Jordi Sevilla tenía claro para esta nueva etapa de su partido en el poder que debían incorporarse otras personas. Por eso, su lugar en la nueva Administración pasaba por ocupar algún puesto de relevancia donde pudiera ser útil su perfil, pero sin responsabilidades políticas directas. Y como con otros recientes nombramientos, como puede ser el de Maurici Lucena al frente de Aena, su disponibilidad estaba supeditada a una oferta como la de Red Eléctrica, donde llega como consejero en representación del Estado.

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REE fue creada en 1985 como empresa dedicada a la operación del sistema eléctrico y al transporte de electricidad. El sistema de empresa pública operando la electricidad que producían empresas privadas fue copiado luego en otros países. Hoy emplea a 1.800 personas y gestiona 44.000 kilómetros de líneas eléctricas. La empresa se encarga de predecir la demanda eléctrica e ir dando entrada a las centrales que producen electricidad. En el primer trimestre de 2018, ganó 189,1 millones de euros, un 4% más que en el mismo periodo de 2017. La empresa fue pionera en la integración de renovables, especialmente la eólica, que ha llegado a suponer en determinados picos el 70% de la producción eléctrica.

Este jueves el consejo de administración de SEPI acordó designar a otro consejeros como paso previo a su nombramiento como presidentes de estas compañías. Se trata de Juanma Serrano —jefe de Gabinete de Sánchez desde 2014 a 2018— como líder de Correos; la ingeniera de Montes Susana Sarriá como la primera mujer en presidir Navantia; Jesús Casas, que llega a la jefatura de Tragsa desde la Dirección General de Desarrollo Rural y Agroalimentación de la Consejería de Desarrollo Rural de Asturias; Gregorio Rabanal, que aterriza en la presidencia de Hunosa tras 24 años ocupando puestos en la empresa pública; el funcionario de carrera José Vicente Berlanga, que accede al liderazgo de Enusa; el periodista Fernando Garea, como presidente de la Agencia EFE; Luisa Faneca, secretaria ejecutiva de Pesca de la ejecutiva federal del PSOE, que se hace cargo de Saeca, y el senador cacereño Juan Andrés Tovar, como nuevo líder de Cetarsa. A ellos hay que sumar los máximos responsables de las empresas dependientes de Fomento: Maurici Lucena en Aena; Isaías Táboas en Renfe; Isabel Pardo de Vera en Adif y Ornella Chacón en Puertos del Estado.