Reynés ajusta en 4.900 millones el valor de los activos de Naturgy

Francisco Reynés arrancó la presentación del plan estratégico del Naturgy (hasta ayer Gas Natural Fenosa) con una buena noticia para los inversores. Elevará el dividendo un 30%, desde un euro hasta 1,30 euros este 2018. La sorpresa negativa llegó más tarde, cuando el nuevo responsable de la compañía levantó la alfombra y reconoció minusvalías por 4.900 millones, fruto de la revisión del valor de los activos de generación convencional.

De esta manera, los accionistas de la compañía irán viendo incrementada su remuneración un 5% cada año hasta el próximo año 2022. Esto significa que los inversores recibirán hasta 1,59 euros en 2022 (+60%), según las estimaciones del plan estratégico que la compañía energética presenta este jueves en Londres. El pago será 100% en efectivo.

Además, esta nueva hoja de ruta contempla un plan de recompra de acciones que puede mejorar aún más la retribución de los accionistas, entre los que destaca el fondo GIP, CVC, Corporación Financiera Alba y Caixabank, dueños en total del 65% de la compañía. La recompra de acciones puede llegar hasta los 2.000 millones de euros durante los próximos cinco años. La empresa recomprará 400 millones de euros al año de acciones propias, siempre que no encuentren inversiones inorgánicas que satisfagan las expectativas de la compañía y mejoren la rentabilidad. El nuevo presidente de la compañía ha priorizado la creación de valor por encima del tamaño.

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En total, el plan prevé casi 9.000 millones de euros de retribución al accionista (6.900 en dividendos y 2.000 más de recompra de acción) para los próximos cinco años empezando ya por este 2018. Tras el anuncio realizado a los mercados, Naturgy ha escalado en bolsa y se ha situado por encima del 1%, con lo que era la compañía más alcista del Ibex en la mañana de este jueves.

La distribución del dividendo se hará en tres partes, cuando hasta ahora eran dos pagos. Un 20% en el primer semestre, otro 35% en el tercer trimestre y el 45% restante tras la junta general de accionistas.

La plan inversor de la compañía se reduce drasticamente sobre la última estrategia que diseñó el exconsejero delegado Rafael Villaseca en 2016. El capex será de 5.300 millones hasta 2022, cuando el periodo 2016-2020 preveía inversiones por 14.000 millones de euros.

Además hay otros 3.100 millones para mantenimiento y un recorte de costes de 500 millones de euros.

3.000 millones de pérdidas

La rebautizada Naturgy ha revisado el valor al que tiene contabilizados los activos de generación convencional, lo que le ha supuesto una minusvalía de 4.900 millones de euros. Esto se debe, según la compañía, a que el nuevo entorno macroeconómico y las perspectivas del sector le obligan a rebajar el valor de las plantas contaminantes que tiene principalmente en España (carbón, nuclear y gas).

Así lo aprobó ayer el Consejo de Administración, lo que se traducirá en que este año la compañía caerá en pérdidas desde el punto de vista contable. No obstante, este ajuste, que se aplicará en este primer semestre de 2018, no tiene impacto en la remuneración de la compañía, apunta Naturgy. El accionista tiene asegurado el dividendo.

Con esta situación, Naturgy dará pérdidas este 2018 por alrededor de 3.000 millones de euros, según ha comentado el presidente de la compañía tras la presentación del plan estratégico.

No obstante, esta pérdida no implicará una salida de caja neta. Esto se debe a que este año tendrá que apuntarse una plusvalía por la revalorización de su distribuidora de gas, de la cual enajenó un 20% el pasado año. Esto deja el resultado individual de la compañía en positivo, ya que esta compensa sobradamente el efecto negativo del parque de generación tradicional en España, ha explicado Reynés.