La minera del uranio salmantino advierte de riesgo político en su salto a bolsa en España
Berkeley Energía se encuentra con la formación de un Gobierno antinuclear justo cuando se prepara para debutar en el Continuo este jueves. Podemos pide al Congreso parar el proyecto de Retortillo
Berkeley Energía, la dueña de la mina de uranio de Retortillo (Salamanca), advierte a sus inversores del riesgo político que entraña su actividad ahora que se disponen a cotizar en el Mercado Continuo. La compañía australiana, que ha anunciado su debut bursátil en España para este jueves, explica que existe riesgo de que los permisos y licencias necesarios para finalizar la construcción y, posteriormente, comenzar la explotación no pudieran obtenerse, o que su obtención sufriera retrasos significativos.
Berkeley se justifica en su folleto explicando que "no puede predecir la forma en que las leyes y disposiciones existentes pudieran ser interpretadas por los organismos responsables de su aplicación o en el marco de cualquier resolución judicial, ni la posible adopción de nuevas leyes y disposiciones legislativas, ni el efecto que tales modificaciones pudiera tener en el negocio o la situación financiera de Berkeley". "No es posible garantizar que los derechos de la sociedad sobre sus activos no adolezcan de algún defecto", concluye la minera.
Narbona, en 2015, sobre la mina: "Me repugna"
Esta advertencia se produce casi en paralelo al cambio de Gobierno en España. Cristina Narbona, uno de los pesos pesados de Pedro Sánchez, señaló en 2015 cuando era miembro del Consejo de Seguridad Nuclear que le "repugnaba desde el punto de vista moral" que se pudiera reanudar la actividad minera de uranio en España. Por ello, decidió abstenerse entonces cuando el organismo emitió un informe favorable a la planta de Retortillo. Fue el único voto en contra del CSN para la última mina a cielo abierto de Europa.
El nombramiento de Teresa Ribera como ministra de Transición Energética y Medio Ambiente es un claro guiño a los grupos ecologistas y en contra del sector nuclear. Por si esto fuera poco, el principal apoyo en la moción de censura del PSOE, Unidos Podemos, planteó hace solo unos días al Congreso de los Diputados que paralizara la mina de uranio de Salamanca. Su impulsor, Juantxo López de Uralde, instaba al Gobierno a parar este proyecto.
Este lunes Ecologistas en Acción otorgaba a Berkeley Energía el premio Atila 2018 por su contribución a la destrucción del medio ambiente. De forma paralela, esta y otras organizaciones ecologistas como Greenpeace aplaudieron el nombramiento de Ribera como ministra y le tendían la mano para alcanzar acuerdos en la lucha contra el cambio climático. Ribera lideró el Consejo Asesor para la Transición Ecológica (Capte), que aboga por el cierre ordenado de las centrales nucleares y apuesta por las energías renovables.
Pese a todo, el consejero delegado de Berkeley, Paul Atherley, destacó que el salto a la bolsa de Londres y España representa "un gran paso hacia delante para la compañía" mientras avanza en el desarrollo de su proyecto minero en Salamanca. Un proyecto que aporta impulso económico a la región, "creando empleo necesario en una zona afectada por uno de los niveles de desempleo más altos de Europa".
Berkeley Energía, la dueña de la mina de uranio de Retortillo (Salamanca), advierte a sus inversores del riesgo político que entraña su actividad ahora que se disponen a cotizar en el Mercado Continuo. La compañía australiana, que ha anunciado su debut bursátil en España para este jueves, explica que existe riesgo de que los permisos y licencias necesarios para finalizar la construcción y, posteriormente, comenzar la explotación no pudieran obtenerse, o que su obtención sufriera retrasos significativos.