El dueño de hoteles RIU, detenido en Miami por un presunto delito de corrupción

El español Luis Riu Güell, propietario de la cadena de hoteles con su mismo nombre, ha ingresado en una cárcel de Miami-Dade tras entregarse ayer al ser acusado por un presunto delito de corrupción, según publica el 'Miami Herald'. Posteriormente, ha sido puesto en libertad tras pagar una fianza de 20.000 dólares y podrá viajar a su casa en Mallorca y a todos los resorts que la cadena tiene en el resto del mundo.

Según la Justicia de Estados Unidos, el empresario mallorquín habría ofrecido estancias gratis en hoteles de lujo de la cadena, que cuenta con más de 100 establecimientos en 19 países como México o República Dominicana, entre otros, al entonces director de Construcción de Miami Beach para lograr su apoyo para la renovación a gran escala del complejo de South Beach.

"Nuestros ejecutivos son absolutamente inocentes de los cargos que se les imputan. Confiamos en que el sistema judicial de Estados Unidos concluirá que estas acusaciones son totalmente infundadas, y nuestros ejecutivos desean impacientemente probar su inocencia", ha señalado la compañía hotelera española en un comunicado.

Riu, que se encontraba en España, se trasladó hasta Miami para comparecer ante el tribunal que juzga el caso, donde fue procesado y esposado. No obstante, tras ser puesto en libertad bajo fianza, se le permite viajar a su casa en Mallorca, así como a los resorts que la cadena hotelera tiene por todo el mundo. "Sus viajes son extensos. Está constantemente en la carretera", ha asegurado su abogado defensor, Barry Wax, ante el juez que instruye el caso para solicitar que pueda salir del país, según informa el 'Miami Herald'.

"Luis Riu viajó desde España para presentarse voluntariamente este lunes ante el juzgado, donde se le presentarían los cargos, tal y como había sido pactado y coordinado con las autoridades locales. Es parte del procedimiento habitual que esta lectura se haga con el acusado en pie y tal como se le ha visto en las imágenes publicadas", han añadido desde la compañía española. "El procedimiento completo fue cuestión de unas horas y el juez no les denegó el permiso para viajar. Ambos ejecutivos podrán seguir visitando los diferentes destinos internacionales de los hoteles libremente. A partir de hoy mismo, Luis Riu retoma sus actividades normales".

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Agustín Rivera. Málaga

La semana pasada, el juez Jorge Cueto imputó al director de Construcción de Miami Beach, Mariano Fernández, así como a Luis Riu, al vicepresidente regional de la compañía, Alejandro Sánchez del Arco, y a la propia filial de la compañía, Hoteles y Resorts Florida. Todos ellos están acusados de cohecho y conspiración en la renovación del Hotel Riu Plaza, en la avenida Collins, cuando el departamento de construcción de Miami Beach fue el encargado de dar los permisos y llevar a cabo las inspecciones que tuvieron lugar entre octubre de 2013 y junio de 2016.

Por su parte, su abogado defensor ha asegurado en declaraciones a los medios que está "convencido de que sus clientes no han cometido ninguno de los crímenes que se les imputan". Sin embargo, la Oficina del Fiscal del Estado de Miami-Dade cree que Fernández ayudó a Riu con los permisos, incluso permitiéndoles eludir multas mientras solicitaba de manera regular habitaciones gratuitas para él y para sus empleados.

Según la orden de arresto, Riu proporcionó a todo el departamento precios muy económicos para "convivencias de equipo" en México y en República Dominicana, como se desprende de una serie de correos electrónicos internos que la Fiscalía ha utilizado para presentar los cargos. En ellos se podía leer al propio Luis Riu asegurando que "lo que él ha hecho por nosotros no ha sido poca cosa", al tiempo que aprobaba las tarifas con descuentos para que los empleados de Fernández permanecieran en el complejo de Punta Cana.

Luis Riu es, junto a su hermana Carmen, una de las grandes fortunas de España. Ocupan el puesto 48º del 'top 100' de los más ricos, con un patrimonio valorado en 1.000 millones de euros. Son la cadena 29ª del mundo. Emplean a 27.000 personas. Reciben cada año a 4,4 millones de clientes.