Fomento contempla cobrar a Abertis la intervención de la UME en la AP-6

El Ministerio de Fomento ha decidido actuar con firmeza en la crisis abierta tras el colapso de la autopista AP-6 los pasados 6 y 7 de enero, cuando cerca de 4.000 vehículos quedaron atrapados durante horas en la carretera gestionada por la concesionaria Iberpistas, filial de Abertis, bajo una intensa nevada.

Aunque la versión oficial de la cartera dirigida por Íñigo de la Serna es que todavía se está recabando información para aclarar las responsabilidades de lo ocurrido, fuentes gubernamentales aseguran que la decisión de abrir un expediente sancionador a la compañía está ya tomada, y que este concluirá una sanción grave.

El decreto 215/1973, que recoge el pliego de cláusulas generales para las autopistas de peaje en régimen de concesión, contempla que "será causa de sanción", entre otras, "la negligencia en la prestación de servicio a los usuarios". Por su parte, la Ley de Carreteras recoge como supuesto de infracción grave la "negligencia en la prestación de servicios a los usuarios o en el cumplimiento de las tareas de explotación de carreteras o elementos funcionales en régimen de concesión, por parte de sus concesionarios, sin perjuicio de las penalizaciones contractuales que, en su caso, se encuentren establecidas en los correspondientes contratos".

A este castigo pueden terminar sumándose los gastos tanto de Fomento como de Defensa e Interior, con los efectivos especiales de urgencia

Aunque las multas económicas que recoge la normativa para las diferentes infracciones —entre 300 y 3.000 euros en leves, de 3.001 a 15.000 euros en graves y de 15.001 a 300.000 euros en muy graves— son relativamente poco cuantiosas, la decisión de sancionar a Abertis sí puede tener importantes consecuencias de cara al rosario de reclamaciones por parte de los miles de usuarios que quedaron atrapados en la AP-6.

Además, a este castigo pueden terminar sumándose los gastos en que incurrieron tanto el Ministerio de Fomento como las carteras de Defensa e Interior, con los efectivos especiales de urgencia que tuvieron que movilizar para poder rescatar a los vehículos atrapados, limpiar la carretera y reabrir el tráfico.

El propio De la Serna ha solicitado a sus compañeros de Gabinete cuantificar todos los costes a los que tuvieron que hacer frente con la vista puesta en evaluar su posible repercusión a la empresa concesionaria, análisis que, si termina concretándose en que corresponde a Abertis hacer frente a estos gastos, supondrá todo un cambio de tercio respecto a la experiencia en crisis pasadas.

En la noche del 6 al 7 de enero, el Gobierno movilizó, entre otros efectivos, 240 profesionales de la Unidad Militar de Emergencias (UME), un centenar de vehículos y ocho máquinas quitanieves que se sumaron a la treintena de las que disponía Iberpistas, refuerzos de urgencia que permitieron reabrir la carretera a las seis de la tarde del día después de Reyes, tras 20 horas de crisis y una helada noche que miles de ciudadanos tuvieron que pasar atrapados en sus coches.

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Cómo se llegó a esta situación, en qué se falló, quiénes fueron los responsables y qué medidas se pueden tomar para evitar que la historia se repita en el futuro será el eje de la comparecencia de De la Serna el próximo miércoles por la tarde en la comisión de Fomento.

En este encuentro se espera que el ministro pueda detallar ya las primeras conclusiones del expediente informativo que tiene abierto a Iberpistas. Por la mañana, en la comisión de Interior, su homólogo Juan Ignacio Zoido también informará sobre los problemas de circulación derivados del temporal.