¿Yo, abogado? "Los robots no van a sustituir a los letrados"

La disrupción que ha supuesto la entrada de la tecnología en la abogacía ha sacudido los cimientos de un sector con fama de conservador y poco amigo de los cambios. Un mantra que pierde fuerza si se observa el esfuerzo que muchos bufetes hacen para desarrollar su perfil 'tech' con la inclusión de nuevas herramientas en sus dinámicas de trabajo.

Inteligencia artificial, 'machine learning', 'blockchain​', big data... Los conceptos se multiplican y los deberes se acumulan para los abogados. De telón de fondo, la preocupación de muchos ante la posibilidad de que un robot les mueva la silla el día de mañana.

"La inteligencia artificial (IA) permite automatizar el trabajo de menos valor y aumenta la productividad de los profesionales", explica César Mejías, Chief Information Officer (CIO) de Garrigues. "Al tener más tiempo, los abogados se centran en aportar valor añadido a los clientes".

Y es que en los despachos hay infinidad de tareas que son susceptibles de ser mecanizadas tales como las transcripciones procedentes de los juzgados, la revisión de contratos a gran escala o la extracción de datos de documentos, por citar varios ejemplos.

Mejías, que dirige el área tecnológica del despacho, cree que en el caso de la IA ocurre lo que pasó con el 'boom' de la nube de hace unos años. "Hay que estudiar bien sus posibilidades y aplicarlo donde tenga sentido", señala al tiempo que recuerda que no ha penetrado por igual en todos los sectores: "En empresas de logística este tema está mucho más avanzado".

Inteligencia artificial, machine learning, blockchain, big data... Los conceptos se multiplican y los deberes se acumulan para los abogados

De cara al futuro, Mejías dibuja un abogado renacentista, impecable desde el punto de vista técnico pero al mismo tiempo dotado de conocimientos tecnológicos, con visión comercial, analítico y con buenas dotes de comunicación. En suma, habilidades que para este directivo son cada día más importantes para ser competitivo en un entorno cada vez más cambiante.

Sobre la posibilidad de que los robots sustituyan a los abogados, Mejías lo descarta. "Lo que pasa es que con la tecnología va a cambiar nuestra forma de trabajar". En este sentido, señala que ya hay dispositivos que se usan para predecir el resultado final de un proceso judicial, herramientas que son complementarias al trabajo del letrado. "Las decisiones finales y el criterio son humanos, ahí es donde reside el valor añadido". A nivel interno, Garrigues ha desarrollado su propia tecnología con Procesa, una herramienta que recopila y cataloga textos y sonidos para hacerlos legibles y comprensibles para los abogados.

'Blockchain', mucho más cerca que la IA

Aunque de un tiempo todos los despachos se han lanzado a la carrera tecnológica, lo cierto es que la IA no es algo que vaya a tener un impacto disruptivo en el corto plazo. Para Mejías, hay otras herramientas más desarrolladas como por ejemplo el 'blockchain'.

Esta nueva tecnología, cada vez más extendida en el ámbito financiero, es una nueva forma de almacenar datos en un libro de acontecimientos digitales compartido en varios bloques por muchas partes diferentes y protegido criptográficamente. Entre otros asuntos, el 'blockchain' se puede utilizar para efectuar transacciones económicas o firmar 'smart contracts'. Sobre este tema, Mejías avisa: "Va a cambiar las relaciones entre las partes de cualquier acuerdo, no solo en el sector legal".