Es noticia
Valentina: de no vender "ni una camiseta" en meses a tener mil pedidos al día
  1. Empresas
emprendedores

Valentina: de no vender "ni una camiseta" en meses a tener mil pedidos al día

¿Cómo un pequeño negocio con apenas ventas se convierte en un 'e-commerce' de éxito? La Tienda de Valentina es un caso de estudio y una referencia en la moda española 'online'

Foto: El equipo de Valentina, con los 'dashboards' de Zeus. (Foto: Carlos Muñoz)
El equipo de Valentina, con los 'dashboards' de Zeus. (Foto: Carlos Muñoz)

La Tienda de Valentina se llama así por un personaje del Circo del Sol, una adorable ancianita diminuta que se quedó grabada en la cabeza de la madre de Beatriz Sánchez. "Si alguna vez tengo que poner nombre a algo, usaré Valentina".

La madre de Sánchez vio la oportunidad de cumplir su propósito años después, en 2015, cuando tras salir de una grave enfermedad y para levantarle el ánimo, sus hijos le regalaron un negocio, o más bien, la semilla de un negocio para que mantuviese la cabeza ocupada. Con 200 euros, toda la inversión que podían permitirse en aquel momento, nació una empresa que ha pasado en dos años de "no vender ni una camiseta en tres meses" a facturar unos siete millones de euros y gestionar más de 1.000 pedidos al día.

Hicieron sus primeras ventas a través de WhatsApp sin tener siquiera una web. Hoy ya tienen página y además 20 trabajadores, trabajan en un almacén de 7.000 metros cuadrados y llegan a procesar 1.300 pedidos al día cuando la cosa está especialmente movidita. Además, ya no compran ropa de otros fabricantes, sino que la diseñan ellos mismos. "La primera vez que nos preguntaron qué etiqueta queríamos que llevasen las prendas, y respondimos que la nuestra, fue un momentazo", bromea Valero.

Las claves de su éxito son la velocidad para entregar los pedidos en 24 horas, una atención al cliente minuciosa ("que las clientas queden siempre absolutamente satisfechas, aunque a ti te cueste dinero") y un sistema informático que les permite obtener información en tiempo real de todo lo que necesitan saber: lo que hay en el almacén, el ritmo al que entra y al que sale, el impacto de sus campañas en Facebook y Google, las visitas a su web y cómo todo esto se transforma en ventas.

placeholder Foto: Carlos Muñoz.
Foto: Carlos Muñoz.

La clave del éxito: su apuesta por la tecnología

Saben que se lo deben todo a la tecnología: las campañas de 'marketing' digital y su sistema informático de gestión son las dos cosas que les han hecho crecer. Este último les ayuda a cruzar las referencias de sus productos, lo que se está buscando en su web, lo que se mira y lo que se compra, de forma que puedan intuir lo que quieren sus clientes, preparar sus pedidos y gestionar su almacén lo más rápido y eficazmente posible. "Lo que antes hacíamos a mano con 60 productos en todo un día, ahora lo hacemos en tiempo real con más de 300 y juntando la información de Facebook, de Google y de nuestra web".

Este 'software', el motor de Valentina, es obra de la empresa española Zeus, pionera en España en el diseño de 'dashboards' personalizados a negocios grandes y pequeños para que automaticen sus procesos habituales y tengan toda la información de forma visual, comprensible e inmediata. "Colegas que tengo en grandes empresas del sector textil y el 'e-commerce' me cuenta que trabajan con informes en papel, ¡en papel! Y luego tienen analistas que trabajan con esos datos para extraer tendencias. Nosotros tenemos esa información automáticamente en tiempo real".

Valentina tiene planes de expansión internacional: "Si hemos conseguido esto en España, creemos que en otros países europeos más introducidos en el 'e-commerce' tenemos una gran oportunidad". Lo que no se plantean de momento es pasar del mundo 'online' al 'offline'. No quieren que el ritmo más lento del negocio en tiendas físicas canibalice su éxito. De momento, la web sigue siendo su mejor escaparate.

La Tienda de Valentina se llama así por un personaje del Circo del Sol, una adorable ancianita diminuta que se quedó grabada en la cabeza de la madre de Beatriz Sánchez. "Si alguna vez tengo que poner nombre a algo, usaré Valentina".

Tecnología E-commerce