El secreto del Santander está en las tarjetas: vende un millón tras endurecer la 1, 2, 3
El Santander colocó un millón de tarjetas en España en el primer trimestre a consecuencia de la exigencia de contratar una de crédito para cobrar intereses en sus cuentas
El endurecimiento de las condiciones de la Cuenta 1, 2, 3, —obligaba a contratar una tarjeta de crédito para seguir cobrando intereses— ha dado su fruto: el Banco Santander colocó nada menos que un millón de nuevas tarjetas en España en el primer trimestre. Como estas tarjetas cobran comisiones, a diferencia de la de débito, esto disparó los ingresos por este concepto un 34% entre enero y marzo, lo cual ayudó a impulsar un 8,3% las comisiones totales en nuestro país. Según su consejero delegado, José Antonio Álvarez, han hecho 128.000 nuevas cuentas 1, 2, 3 en el período y ya alcanzan los 2,1 millones.
Como se recordará, la modificación de condiciones de la 1, 2, 3 que entró en vigor en febrero consistía en la obligación de contratar una tarjeta de crédito o 'revolving' con una comisión de 3 euros mensuales (36 al año) para poder seguir cobrando intereses de la cuenta (hasta el 3% en función del saldo). Esta comisión se sumaba a los 3 euros al mes que ya cobraba esta cuenta por mantenimiento. Así, la mayoría de los clientes tiene que pagar 72 euros al año: 36 por la cuenta y 36 por las tarjetas. Además, exigía al menos un movimiento trimestral de una tarjeta de crédito para seguir percibiendo intereses.
Con esta medida el banco que preside Ana Botín pretendía rentabilizar la Cuenta 1, 2, 3, la que más interés paga en el mercado (Bankinter tiene una cuenta nómina que da el 5% pero sólo durante un año) y que, en el entorno de tipos actual, le costaba unos 500 millones anuales al banco. Así, o bien los clientes no contrataban la tarjeta y la entidad se ahorraba los intereses, o bien la contrataban y les cobraba la comisión: el Santander siempre ganaba. Lo que ha sucedido es lo segundo, de ahí esa colocación récord de un millón de tarjetas en el primer trimestre. No obstante, el crecimiento del 34% de las comisiones de tarjetas supone "un volumen bajo, son ingresos inmateriales para el conjunto del banco", según Álvarez.
Otro motivo para esta imposición de nuevas comisiones a cambio de los mismos intereses era la necesidad de compensar los costes de la aplicación Apple Pay para pagar con el iPhone, que Santander ofrece en exclusiva en España, por lo que el 50% de los pagos por móvil en el país se hacen con el Santander. Apple cobra un coste de 12 céntimos por transacción y prohíbe en sus contratos trasladar el coste al cliente, por lo que hay que recaudar ese dinero de otra forma: con las citadas comisiones que se aplican a todos los usuarios, no sólo a los que tengan la aplicación en sus teléfonos.
No rebajará los intereses de la Cuenta 1, 2, 3
Este 'comisionazo' provocó que los competidores del Santander se lanzaran a robarle clientes con dictintos tipos de ofertas y regalos a los que se llevaran su dinero. ¿Han tenido éxito? Es difícil de saber. Según Álvarez, en los tres primeros meses del año la cuenta 1, 2, 3 tiene 128.000 clientes nuevos como saldo neto entre aperturas y cierres, pero no distingue entre los que ya eran clientes de Santander y los que vienen de fuera. Ni tampoco cuantifica la variación del saldo total de este producto, es decir, cuánto dinero ha entrado o salido. En total, el Santander gestiona 2,1 millones de estas cuentas en nuestro país. Por otro lado, el consejero delegado descarta una rebaja de su remuneración del estilo de la que aplicó en Reino Unido el año pasado.
A pesar de la subida de comisiones de la Cuenta 1, 2, 3, Álvarez discrepa del nuevo subgobernador del Banco de España, Javier Alonso, que ha abogado por que los bancos cobren por los servicios digitales que ofrecen a los clientes: "No vamos a cambiar la política de de no cobrar por los servicios digitales. Donde aportamos valor, ponemos una comisión; y donde no, no cobramos". Sí se muestra de acuerdo en que los bancos deben hablar más claramente con sus clientes, y la relación con los mismos supondrá el 40% del bonus de los empleados del Santander.
El beneficio crece el 21% en España
El grupo Santander batió las previsiones con un beneficio de 1.867 millones, el 16,9% más, en el primer trimestre. El beneficio del banco en España registró un crecimiento del 20,68% en el primer trimestre hasta 356 millones: el negocio bancario ganó 362, Consumer Finance aportó 67 y el negocio inmobiliario restó unas pérdidas de 70 millones. Dentro de la actividad bancaria, las comisiones crecieron el 8,3% hasta 459 millones, gracias a un aumento del 19% de las que se cobran a los clientes mayoristas y del 5% de las aplicadas a los minoristas (dentro de las que se incluyen las de las tarjetas). Esto sirve para compensar en parte una caída del 8,9% del margen de intereses -el que mide el negocio puro bancario- hasta 747 millones.
La caída de costes del 4,6% y, sobre todo, la drástica reducción de las provisiones para saneamientos en un 29,4% dan la vuelta a la tortilla y permiten un crecimiento del resultado antes de impuestos del 17,2%. El pago de impuestos en España también crece con fuerza, el 16% en términos interanuales, hasta 146 millones en el trimestre.
El endurecimiento de las condiciones de la Cuenta 1, 2, 3, —obligaba a contratar una tarjeta de crédito para seguir cobrando intereses— ha dado su fruto: el Banco Santander colocó nada menos que un millón de nuevas tarjetas en España en el primer trimestre. Como estas tarjetas cobran comisiones, a diferencia de la de débito, esto disparó los ingresos por este concepto un 34% entre enero y marzo, lo cual ayudó a impulsar un 8,3% las comisiones totales en nuestro país. Según su consejero delegado, José Antonio Álvarez, han hecho 128.000 nuevas cuentas 1, 2, 3 en el período y ya alcanzan los 2,1 millones.