Es noticia
La gran banca aún arrastra 70.000 millones de ladrillo tóxico, más que el coste del rescate
  1. Empresas
Los adjudicados del Ibex

La gran banca aún arrastra 70.000 millones de ladrillo tóxico, más que el coste del rescate

Casi una década después de que Europa saliera al rescate del sistema financiero español, la gran banca cotizada todavía tiene en su balance adjudicados por 70.000 millones de euros

Foto: La urbanización de Francisco Hernando, 'el Pocero', en Seseña es un icono del ladrillo tóxico.
La urbanización de Francisco Hernando, 'el Pocero', en Seseña es un icono del ladrillo tóxico.

Casi una década después de que la Unión Europea aprobara una línea de hasta 100.000 millones para rescatar al sector financiero español, las entidades supervivientes de la crisis siguen teniendo en sus balances activos adjudicados por un importe superior a la factura total que ha costado a las arcas públicas salvar a las antiguas cajas de ahorros.

Según los últimos datos del Tribunal de Cuentas, el coste del rescate asciende a 60.700 millones de euros; mientras que el ladrillo tóxico que reconocen tener en sus balances solo los grandes bancos cotizados roza los 70.000 millones al cierre de 2016, según puede comprobarse en los últimos informes anuales presentados por estas entidades ante la CNMV —Comisión Nacional del Mercado de Valores—.

En ellos, el supervisor los ha obligado a desglosar su exposición inmobiliaria, detallando todos los activos que se han adjudicado en España, o han recibido en pago de deudas, incluidas las inversiones en entidades de naturaleza inmobiliaria. Y el resultado es que el importe bruto de todos los activos que todavía descansan en los balances de Santander, BBVA, CaixaBank, Popular, Sabadell, Bankia y Bankinter, los únicos representantes del sector en el selectivo Ibex 35, alcanza los 69.972,2 millones de euros, de los cuales 26.609 millones corresponden a suelos.

No obstante, para ver la foto completa, también debe tenerse en cuenta el ejercicio de saneamiento realizado por las entidades tras los decretos Guindos y los posteriores esfuerzos llevados a cabo para tratar de acercar el valor en libros de estos activos a su precio real, ejercicio que ha supuesto a los bancos correcciones de valor por deterioro de 33.234,7 millones, y que ha situado el valor neto de estos adjudicados en 36.737 millones.

La entidad que mayores esfuerzos ha realizado por reconocer la pérdida de valor de estos adjudicados ha sido BBVA, cuyas provisiones totales superan el 60%, y que en el caso de los suelos llegan al 74%. La otra cara de la moneda corresponde a Bankinter, que en ambos casos apenas llega al 20%, pero con la diferencia de que su cifra total de adjudicados es muy inferior a la del resto, situándose en apenas 327,8 millones, frente a los 16.851 millones de Popular, los 15.445 millones de BBVA, los 13.296 millones de CaixaBank, los 10.732 millones de Santander, los 9.870 millones de Sabadell y los 3.448,8 millones de Bankia.

La gran banca ha elevado un 6% las correcciones de valor de todos sus adjudicados, lo que ha permitido reducir en un 8,8% el valor neto de estos activos

Además, en el caso de la entidad presidida por José Ignacio Goirigolzarri, el grueso de sus activos tóxicos fue traspasado a la Sareb cuando se constituyó, lo que no ha impedido que, posteriormente, haya seguido quedándose con inmuebles, promociones a medio construir y terrenos, ante los impagos de sus anteriores propietarios.

En términos netos, Popular es la sociedad que más activos tóxicos continúa arrastrando, al alcanzar la cifra de 10.305 millones; cifra muy superior a los 6.876 millones de CaixaBank; los 6.244,7 millones de Sabadell; los 6.012 millones de BBVA; los 4.787,2 millones de Santander; los 2.251,2 millones de Bankia, o los 260,2 de Bankinter.

A pesar de la larga travesía por el desierto transcurrida desde que estalló la crisis inmobiliaria y financiera en España, los bancos todavía siguen teniendo que ejecutar muchos préstamos que los obligan a seguir engordando su cifra de adjudicados. Esto explica que, a pesar de las numerosas ventas de carteras y activos vistas en los últimos tiempos, y al cierre de operaciones como el traspaso de viviendas a Testa, el G-7 de la banca apenas haya conseguido rebajar en un 2,3% su cifra global de adjudicados durante 2016; y un 0,73% en el caso de los suelos.

En cambio, durante el pasado ejercicio, y ante la vuelta de tuerca que ha supuesto la nueva circular del Banco de España, han elevado un 6% las provisiones, lo que ha permitido que, en términos netos, el valor en libros de los adjudicados de la gran banca se haya reducido en un 8,8% en total; y en un 10% en el caso de los suelos.

Este movimiento podría verse agudizado en los próximos años si España hace caso a la petición que acaba de realizar Danièle Nouy, presidenta del Mecanismo de Supervisión del BCE, que ha solicitado a los gobiernos nacionales que tomen medidas para agilizar la ejecución de los préstamos morosos y, con ella, la limpieza de los balances del sector.

Casi una década después de que la Unión Europea aprobara una línea de hasta 100.000 millones para rescatar al sector financiero español, las entidades supervivientes de la crisis siguen teniendo en sus balances activos adjudicados por un importe superior a la factura total que ha costado a las arcas públicas salvar a las antiguas cajas de ahorros.

Banca Sector Financiero Ibex 35 Noticias de Bankinter
El redactor recomienda