La Caixa y Repsol ponen fin al pacto: cierran 25 años de control conjunto de Gas Natural
Lo que hasta ahora había sido una cuestión de dos, ahora pasará a ser un triunvirato, en donde GIP y Repsol tendrán un 20% de Gas Natural y La Caixa retendrá un 24% del capital
La Caixa y Repsol pondrán fin en los próximos meses a 25 años de control conjunto de Gas Natural, al no renovar el pacto parasocial por el que hasta ahora se repartían el poder de la compañía gasista. A partir de la venta del 20% de Gas Natural al fondo Global Infraestructure Partners (GIP), compañía que mantiene conversaciones muy avanzadas al respecto, ni la Fundación Bancaria La Caixa ni Repsol renovarán los acuerdos parasociales que hasta ahora habían regido el destino de la empresa, según explican fuentes financieras conocedoras de los entresijos de la transacción.
Por tanto, lo que hasta ahora había sido una cuestión de dos, ahora pasará a ser un triunvirato, en donde GIP y Repsol tendrán un 20% de Gas Natural y La Caixa retendrá un 24% y la presidencia, que, como estaba previsto antes de que se negociase este acuerdo, pasará a ser ocupada por Isidre Fainé, a su vez presidente de la fundación bancaria catalana. Portavoces de La Caixa y de Repsol han declinado hacer declaraciones al respecto.
Los pactos parasociales contemplan dos posibilidades para su finalización: o que una de las dos partes baje del 15% o que entre un tercer accionista con un peso relevante. Será esta segunda disposición la que entre en vigor poniendo final a los pactos, según han explicado las fuentes conocedoras de los acuerdos antes mencionadas. Tanto Repsol como La Caixa prevén mantener como mínimo un 20% de Gas Natural. Además la sintonía entre Fainé y el presidente de Repsol, Antoni Brufau, pasa por un buen momento, según fuentes del sector energético.
El pacto parasocial entre Repsol y La Caixa para controlar Gas Natural se firmó en el año 2000, pero el control efectivo que ambas partes mantienen sobre la gasista catalana se remonta más atrás, al año 1991, cuando se constituyó Gas Natural SDG, fruto de la fusión entre Catalana de Gas y Gas Madrid. Por tanto, el fin de los pactos parasociales supone también el fin de toda una época.
Algunos de los flecos que se están negociando esta semana son los consejeros que tendrá GIP en Gas Natural. El fondo de infraestructuras aspira a tres, pero los actuales socios de referencia de la gasista son más proclives a que sean dos sillones en este órgano de dirección. Sin embargo, se espera llegar a un acuerdo también en este aspecto a finales de este mes.
Una nueva era
Como GIP invertirá en la operación cerca de 4.000 millones de euros, su peso específico crecerá dentro de la compañía en esta nueva época, que además estará marcada por la llegada de un nuevo presidente, en la figura de Isidre Fainé, que previsiblemente tomará posesión del cargo en sustitución de Salvador Gabarró durante el próximo otoño.
GIP tiene un perfil de inversor a largo plazo y encaja mejor con los planteamientos de socios como La Caixa, que lleva en la compañía décadas y que tiene voluntad de permanencia en el capital social.
Finales de septiembre
La operación se podría firmar a finales de septiembre. Algunas fuentes financieras apuntan a que podría ser después del próximo 27 de septiembre, cuando se cobre un dividendo a cuenta de los resultados de 2016 que supone 0,33 euros por acción. Eso implica que La Caixa se llevará 113 millones, correspondiente con su actual 34,4%, y Repsol, por la misma retribución, 99 millones, por el 30% que tiene hasta ahora. Inmediatamente después se produciría la venta del 20% de Gas Natural, por la que cada socio ingresaría otros 2.000 millones.
En caso de que se avanzase la transacción, algo que algunas fuentes tampoco descartan, GIP debería pagar un sobreprecio para compensar a los vendedores que perderían estas cifras. Gas Natural incrementó su dividendo en la última junta hasta situarlo en un euro por acción.
La Caixa y Repsol pondrán fin en los próximos meses a 25 años de control conjunto de Gas Natural, al no renovar el pacto parasocial por el que hasta ahora se repartían el poder de la compañía gasista. A partir de la venta del 20% de Gas Natural al fondo Global Infraestructure Partners (GIP), compañía que mantiene conversaciones muy avanzadas al respecto, ni la Fundación Bancaria La Caixa ni Repsol renovarán los acuerdos parasociales que hasta ahora habían regido el destino de la empresa, según explican fuentes financieras conocedoras de los entresijos de la transacción.