Trinitario Casanova llega a un acuerdo con Wanda para comprar el Edificio España

El culebrón del Edificio España parece estar llegando a su fin. Según ha podido confirmar El Confidencial con fuentes conocedoras, el empresario Trinitario Casanova ha puesto sobre la mesa una oferta ligeramente superior a los 265 millones que pagó el grupo chino Wanda a Santander hace dos años. Se trata de la mejor propuesta que ha recibido el grupo de Wang JianLin por su rascacielos, después de que el pasado 30 de junio se cerrara el plazo para recibir candidaturas dentro del proceso oficial de venta del inmueble.

[Estos son los planes de Trinitario Casanova para el Edificio España]

Las mismas fuentes señalan que la propuesta de Trinitario Casanova es la más elevada y la que ha permitido llegar a un principio de acuerdo entre las dos partes, aunque habrá que esperar hasta después de verano para terminar de cerrar todos los flecos y llevar a buen puerto la operación.

Cuando llegue ese momento, se habrá terminado de resolver una de las mayores crisis que ha tenido que afrontar el Ejecutivo de Manuela Carmena, que a principios de año vio que uno de los mayores conglomerados asiáticos ponía a su joven Gobierno contra las cuerdas al anunciar la decisión de abandonar sus planes inmobiliarios en Madrid.

Sin embargo, el reciente convenio sellado entre el Ayuntamiento de Madrid y el Atlético de Madrid, club donde Wanda posee el 20%, para desbloquear la operación Calderón, y el principio de acuerdo con Casanova permiten que las aguas vuelvan a su cauce.

Trinitario Casanova se ha convertido en uno de los grandes protagonistas nacionales del resurgir del mercado inmobiliario, donde a través de Grupo Baraka ha protagonizado en los últimos tiempos importantes operaciones, como la adquisición de Parque Empresarial El Olivar, que le convierte en uno de los principales terratenientes de Valdebebas (Madrid), un local en Gran Vía 44, que posteriormente vendió a Hines, o las instalaciones de Alstom en Santa Perpètua de Mogoda (Barcelona) por 60 millones de euros.

Wanda encargó el pasado mes de febrero a JLL la venta del Edificio España ante la imposibilidad de llegar a un acuerdo con el ayuntamiento para derribar la fachada. Tras unos meses de alta tensión, las dos partes han terminado constituyendo un equipo de trabajo dirigido a ir dando solución a los problemas que vayan surgiendo en las obras de remodelación del inmueble.

Camino de ida y vuelta

Esta aproximación de posturas ha permitido al grupo chino devolver parte de su pasado esplendor al inmueble, ya que la crisis abierta con el ayuntamiento jugó directamente en contra de sus intereses durante el proceso de venta y han sido pocos los inversores que han puesto sobre la mesa, al menos, 200 millones de euros.

Entre los grupos que se han interesado por este proceso, han destacado los también asiáticos Platinum y Fosum, la aseguradora AXA, el grupo filipino Emperador o el estadounidense Hines. Incluso la promotora Domo miró el folleto.

Ahora, el gran interrogante que hay sobre la mesa, además de cómo termine cristalizando este principio de acuerdo, son los planes que tenga Trinitario Casanova para el edificio, ya que en el pasado el empresario ha destacado por entrar en operaciones complejas para, una vez cazada la presa, vender el activo con jugosas y rápidas plusvalías, como se vio en Gran Vía 44, a inversores menos adictos al riesgo.