¿Un euro por empleado? El impuesto que teme el gran comercio

Lo llaman Fundación Laboral de Comercio y nace para lograr un sector "más profesional, seguro y competitivo". La creación de este organismo no está exenta de polémica. Las grandes empresas no quieren dejar en manos de intermediarios algo tan clave como la formación de sus empleados, y menos después de todos los escándalos que han salido a la luz en los últimos años. Los sindicatos y la Confederación Española de Comercio (CEC) negocian desde 2014 cómo poner en marcha esta fundación ya registrada, y, no menos relevante, cómo financiarla.

Poco importa que las negociaciones lleven meses congeladas ante el vacío de poder. Los gigantes del comercio están de uñas ante lo que algunas fuentes consultadas por este periódico consideran "un chiringuito de formación". ¿Quién lo pagará? Si echamos un vistazo a la Fundación Laboral de la Construcción, fundada en 1992, el 47% del dinero sale de las cotizaciones sociales del empresario y el 29%, de subvenciones públicas. Aquí los trabajadores no ponen nada a diferencia de lo planeado en el sector de la hostelería, donde los empleados y los empresarios aportarían un 0,10% de su sueldo si este plan llegara a aprobarse.

La Fundación Laboral de Hostelería está diseñada para nutrirse en parte de cotizaciones de empresarios y trabajadores

La CEC insiste en que su modelo a seguir está en el sector de la construcción, pero niega que se hayan concretado medidas, ante el 'impasse' político. "No hemos puesto ninguna fórmula de financiación encima de la mesa ni hemos avanzado en su desarrollo. Vamos a esperar". Pero otras fuentes del sector aseguran que los actores de la negociación a tres bandas -CEC, UGT y CCOO- han hablado de establecer una cotización obligatoria de un euro mensual por trabajador. Ellos lo niegan con rotundidad. "En ningún momento se ha hablado de ninguna cuota. La negociación está muy verde", señalan desde CCOO.

Antes de dar un paso en falso, la CEC prefiere esperar al fallo del Tribunal Supremo sobre la fundación de hostelería. La Dirección General de Empleo no estaba de acuerdo con la cotización que afecta a los empleados y llevó el caso a la Audiencia Nacional. El juez de primera instancia avaló esta fórmula al considerarla correcta, pero el Estado recurrió la sentencia y las negociaciones siguen paralizadas por este motivo. "Estamos pendientes de concretar el sistema de financiación. Este proyecto lleva muchos años de maduración y representa una mejoría para los profesionales", defiende Emilio Gallego, secretario general de la Federación Española de Hostelería (FEHR).

"Las grandes empresas lo van a impugnar"

"¿Te imaginas que Mercadona pusiera 75.000 euros para esa fundación?", plantean fuentes de la patronal al vincularlo con el número de empleados. Las grandes empresas ponen líneas rojas y miran con desconfianza a un organismo que no quieren ver ni en pintura. "Si sale adelante, esto lo van a impugnar. Lo están vigilando muy de cerca y no están dispuestas" porque nadie conoce mejor que ellas la formación que necesitan sus trabajadores. Desde la CEC, defienden que esta fundación servirá para crear un "espacio de diálogo" y lograr un sector "unido y fuerte".

"En el comercio estamos más centrados en renovar el acuerdo marco que venció el 31 de diciembre de 2015, porque si no, decae todo. Incluido ese compromiso para sacar adelante la fundación", subrayan desde UGT. Formación, riesgos laborales y empleo son los tres pilares de estos organismos. "Independientemente de la actividad realizada, necesitamos soportes que den apoyo. O ponemos cada uno un poquito, o estaremos desamparados", zanja Gallego.