AB Inbev, primera cervecera mundial, vende en España y revisa su estrategia

AB Inbev, la antigua Anheuser Busch, se ha convertido en la primera cervecera del mundo tras la compra de SAB Miller. Pero en España, el grupo casi no pinta nada. Y pintará menos porque la pequeña cervecera en Canarias que todavía tiene SAB Miller se ha puesto a la venta, según explican fuentes financieras vinculadas a la operación.

SAB Miller tiene el 73% de Compañía Cervecera Canarias, una pequeña empresa que opera en el mercado insular. Apenas factura 122 millones de euros según se prevé para el cierre de este año, muy poco para un grupo mundial que tras la megafusión facturará más de 58.000 millones de dólares, según las previsiones llevadas a cabo por los impulsores de la operación.

Por ello, SAB Miller se ha puesto a la venta. Pero que sea pequeña no quiere decir que no resulte interesante para otras empresas del sector. Compañía Cervecera Canarias gana un millón de euros anuales, registra 20 millones de ebitda, cuenta con dos plantas de producción -en Tenerife y en Las Palmas- y produce 85 millones de litros anuales, en esencia cerveza pero también zumos y otros tipos de cerveza. Además, tiene las marcas Dorada y Tropical, muy afianzadas a nivel local, en especial en el canal de distribución de hostelería.

Compañía Cervecera Canarias ha firmado también interesantes acuerdos para terceros, algunos de ellos todavía no puestos del todo en valor, como su pacto para hacer la marca blanca de cerveza Mercadona para las Islas Afortunadas. Otro contrato clave es con Coca-Cola Iberian Partners, gracias al cual desde 2010 es el distribuidor de Coca-Cola en exclusiva para los mercados de Fuerteventura y Lanzarote.

Las valoraciones que se manejan para esta operación rondan los 200 millones de euros, poco para SAB Miller pero mucho para los empresarios canarios que controlan el 27% restante de Compañía Cervecera Canarias.

Fuera del octavo mercado mundial

Si al final se cierra la compra, el AB Inbev se quedará fuera del octavo mercado cervecero mundial, España. Un país muy cervecero dominado por una industria local fuerte con grupos propios familiares muy bien posicionados, como serían los casos de Damm (Carceller) o Mahou-San Miguel (familias Gervás y Mahou).

Pero en vez de vender, estos grupos están creciendo. El caso de Mahou-San Miguel es emblemático: están negociando la compra de la cervecera Anchor en Estados Unidos, en una operación que rondaría los 275 millones de euros, según Bloomberg.

Rentabilidad

Los cerveceros españoles ganan dinero. Dentro de la alimentación son los que mejor han capeado la crisis. Y en este contexto, crecer a costa de controlar un mercado como el canario, donde es costoso competir por su singularidad geográfica. Como todo, dependerá del precio.

En el caso de AB Inbev, la estrategia del grupo apunta a un o todo o nada en España. O una presencia destacable en el mercado español, lo que implicaría alguna compra de mayor cuantía, o mejor centrarse en otros países más significativos para el gigante cervecero mundial.