CaixaBank se enfrenta al bloqueo de sus socios angoleños en la OPA sobre BPI

CaixaBank se encamina hacia una situación de bloqueo en su OPA sobre BPI (ver cotización). La junta que se celebra hoy en Lisboa debe decidir sobre la principal condición que pone CaixaBank (ver cotización) en su oferta: que se levante el blindaje que en este momento le impide ejercer la totalidad de sus derechos políticos, los cuales se limitan al 20% pese a tener el 44% del capital. Previsiblemente, la segunda accionista de BPI, la hija del dictador angoleño Isabel dos Santos, votará en contra del levantamiento de esta limitación, lo que puede hacer descarrillar la operación de compra.

Fuentes de CaixaBank han declinado hacer declaraciones, pero fuentes financieras cercanas a la oferta han asegurado que CaixaBank camina hacia una situación de bloqueo a causa de la negativa de Isabel dos Santos a votar a favor del levantamiento del blindaje. Dicho blindaje implica que CaixaBank sólo pueda ejercer el 20% de los derechos políticos.

La única posibilidad es que hoy mismo Isabel dos Santos, que a través del grupo Santoro tiene el 18,7% del banco y es por tanto el segundo accionista del grupo luso, alcance un pacto con CaixaBank para subir el precio a cambio de que se elimine la limitación de sus votos políticos. Complicado para una operación que, en caso de prosperar, le supondría a CaixaBank un desembolso cercano a los 1.000 millones si acudiesen todos los accionistas minoritarios.

La oferta de CaixaBank plantea un precio en la OPA de BPI de 1,329 euros por título, ligeramente superior a su cotización actual en la Bolsa de Lisboa

La oferta de CaixaBank plantea un precio en la OPA de BPI de 1,329 euros por título, ligeramente superior a su cotización actual en la bolsa de Lisboa. El problema estriba en que Isabel dos Santos asegura que el valor es muy superior, en concreto 2,26 euros. En este momento, la oferta de CaixaBank está por encima del precio de cotización de BPI.

Diversos escenarios

Por tanto, ante la junta se abren diversos escenarios. El primero es que la OPA de CaixaBank fracase por la negativa de Isabel dos Santos a cumplir con la principal condición del banco que preside Isidre Fainé para lanzar su oferta sobre la entidad financiera lusa. Esta parece la situación más probable: un bloqueo que conduzca al embarrancamiento de la OPA.

Hay otras alternativas. La más lógica sería una mejora del precio, si bien no llegaría a las expectativas alcistas de la hija del presidente angoleño. Pero fuentes financieras la descartan porque consideran que no existe margen para subir el precio manteniendo el atractivo para los compradores. En todo caso, esta opción se limitaría de forma temporal al día de hoy: implicaría mejorar el precio a cambio de levantar el blindaje, tal y como plantea el banco controlado por La Caixa.

Tercera vía

Una tercera vía supondría un aplazamiento de la decisión, igual que se tomó en la última junta de accionistas de BPI, para ganar tiempo hasta que CaixaBank y el grupo Santoro lleguen a un acuerdo. Pero eso ya se intentó y no dio mucho de sí hace sólo dos meses.

Una posibilidad es que hoy Isabel dos Santos alcance un pacto con CaixaBank para subir el precio a cambio de que se elimine la limitación de sus votos políticos

Otra solución posible pasaría por mantener la OPA renunciando a su condicionalidad, es decir, al levantamiento del blindaje. Pero esto parece poco probable. La oferta supone un sobreprecio en un mercado como el luso, de bajo crecimiento y con muchas incertidumbres.

BPI es el tercer banco privado de Portugal. Si la OPA prosperase, CaixaBank se convertiría en un gran banco ibérico tal y como ya lo es el Banco Santander. BPI suma más de 42.000 millones de euros de activos, con unos fondos propios de 2.100 millones de euros. CaixaBank estima que, tras su integración, habrá 100 millones de sinergias en 2015 y otros 130 millones en 2016.