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Santander asegura que la recuperación es sólida y descuenta el 'efecto Podemos'
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SE NIEGA A HABLAR DE RATO TRAS EL ESCÁNDALO

Santander asegura que la recuperación es sólida y descuenta el 'efecto Podemos'

El Banco Santander cree que la incertidumbre política no influirá en la recuperación, dada su solidez. Además, ha admitido que puede volver a suspender los test de estrés en EEUU y calla sobre Rato

Foto: José Antonio Álvarez, durante la presentación de resultados (Efe)
José Antonio Álvarez, durante la presentación de resultados (Efe)

En la presentación de los resultados del primer trimestre, el nuevo consejero delegado del Santander (ver cotización), José Antonio Álvarez, ha destacado la fortaleza de la recuperación económica española, y ha descartado que pueda descarrilar por culpa de la incertidumbre electoral: "La situación política ya está metida en esa ecuación, lo que le afecte de positivo o de negativo ya está descontado, y nosotros creemos que la situación económica va a ir bien".

Álvarez ha recordado que hay factores externos que están favoreciendo la recuperación, en especial la compra de bonos por parte del BCE (el quantitative easing) y la caída del precio del petróleo, aunque ha reconocido que "el proceso ya se había iniciado con las reformas iniciadas en España" por el Gobierno. Y, como todos los empresarios, ha añadido que mientras no se recupere el empleo, no podremos decir que hemos salido de la crisis.

Del mismo modo, el número dos de Ana Patricia Botín se ha mostrado muy cauto con la recuperación del crédito en España. Aunque espera que el banco sí registre crecimiento este mismo año, para el conjunto de la banca cree que 2015 seguirá siendo un año de caída de volúmenes y que no será hasta 2016 cuando se toque suelo. Una previsión que choca con el optimismo generalizado, que espera ver crecimientos ya en este ejercicio.

Respecto a uno de los grandes temas de la actualidad, el 'caso Rato', el primer banco español ha cambiado radicalmente de actitud: cuando el exvicepresidente del Gobierno estaba en el consejo asesor del Santander, Javier Marín (el antecesor de Álvarez con Emilio Botín) se deshacía en elogios sobre él; ahora, tras el estallido del escándalo, Álvarez se ha limitado a decir que "no voy a hablar de terceras personas".

Puede volver a suspender los test en 2016

Por otro lado, ha reconocido que los esfuerzos que está realizando el banco para cumplir los requisitos de la Reserva Federal estadounidense pueden no ser suficientes para aprobar los test de estrés en 2016, después de los suspensos de 2014 y 2015. "Es una labor de varios años, si consideran que es suficiente ir en el buen camino, aprobaremos; si piensan que tenemos que llegar al destino, suspenderemos, porque para esa fecha no vamos a tener en EEUU un holding como el de Boadilla".

Según la tesis de Álvarez, que ha recordado que el Santander está entre los 10 primeros bancos norteamericanos en términos cuantitativos, el suspenso cualitativo proviene de que el supervisor le ha obligado a crear un holding que dirija todas las operaciones del banco en el país, tanto el antiguo Sovereign como la financiera de consumo. Ese holding debe partir de cero hasta tener unos 500 empleados, un proceso que no culmina en un solo año y que explica el incremento en un 7% de los costes del banco en ese país. En todo caso, asegura que solucionar este problema es "una prioridad estratégica".

En la presentación de los resultados del primer trimestre, el nuevo consejero delegado del Santander (ver cotización), José Antonio Álvarez, ha destacado la fortaleza de la recuperación económica española, y ha descartado que pueda descarrilar por culpa de la incertidumbre electoral: "La situación política ya está metida en esa ecuación, lo que le afecte de positivo o de negativo ya está descontado, y nosotros creemos que la situación económica va a ir bien".

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