Es noticia
FCC se replantea el futuro de Cementos Portland tras suspender la venta de Realia
  1. Empresas
prevé recuperar el dividendo en 2017

FCC se replantea el futuro de Cementos Portland tras suspender la venta de Realia

La compañía, que ha vuelto a generar caja positiva, ha puesto sobre la mesa una exclusión de su filial cementera siempre y cuando un movimiento de este tipo mejore la rentabilidad del grupo

Foto: Juan Bejar, consejero delegado de FCC, y la presidenta de la empresa, Esther Alcocer Koplowitz
Juan Bejar, consejero delegado de FCC, y la presidenta de la empresa, Esther Alcocer Koplowitz

Borrón y cuenta nueva. Es el mensaje que ha transmitido el consejero delegado de FCC, Juan Béjar, en la presentación de resultados de la compañía, que ha conseguido volver a generar caja positiva en 2014, al pasar de -188,1 millones de euros de cash flow libre al cierre de 2013 a 45,4 millones un año después, y que ha mejorado un 12% su ebitda gracias, en gran parte, a Cementos Portland, filial cuyo futuro podría sufrir importantes cambios en el medio plazo.

Esto no ha evitado que el grupo controlado por Carlos Slim y la familia Koplowitz haya tenido unas pérdidas de 724,3 millones derivadas del nuevo (y según el grupo último) gran saneamiento que va a llevar a cabo: las dotaciones por 650 millones que ha realizado en su filial de servicios británica, una decisión que, según fuentes conocedoras, fue una de las primeras condiciones que puso Carlos Slim para entrar en la compañía y convertirse en su primer accionista, con un 25,6% del capital.

Desde entonces, el empresario mexicano, al que Forbes acaba de refrendar como la segunda mayor fortuna del mundo, sólo por detrás de Bill Gates, que también tiene un 5,7% de FCC, ha puesto bajo revisión toda la operativa del grupo, con salomónicas decisiones como la de suspender la venta de Realia, inmobiliaria donde FCC posee el 38% del capital y sobre la cual Hispania ha lanzado una opa.

En cambio, ha abierto la puerta a cambiar el rumbo de Cementos Portland, como publicó El Confidencial y ha dejado entrever Juan Béjar, quien ha asegurado que ahora "se abre para nosotros el número de alternativas en Portland" y que cualquier tipo de operación corporativa "nos la tendremos que plantear si seguimos teniendo las mismas prioridades", y éstas van dirigidas siempre a mejorar la rentabilidad.

Aunque ha declinado hablar directamente de qué tipo de alternativas están dispuestos a abordar, sobre la mesa está la posibilidad de una exclusión de la compañía a medio plazo, opción que ha cobrado sentido tras el reciente movimiento en la cúpula de la filial cementera.

El viernes, frente al fichaje que estaba en marcha de un nuevo presidente, Portland anunció el nombramiento de Gerardo Kuri Kaufmann, mano derecha de Slim, como consejero delegado, al tiempo que la presidencia se ha dejado vacante. El primer reto que deberá abordar el nuevo equipo será el aumento de capital de 200 millones de euros que ha puesto en marcha la compañía y a la que FCC acudirá, previsiblemente, para no diluir su participación en la cementera, que ha cerrado hoy en bolsa con una caída del 1,52%, hasta los 7,13 euros por acción, recorte que se suma al desplome del 9,6% del pasado viernes, su peor sesión en dos años.

Esta nueva cúpula, en la que también destaca el nombramiento de Víctor García Brosa como director general, también ha empezado ya a trabajar en la refinanciación de 1.114 millones de deuda, aunque tiene de plazo hasta 2016.

El dividendo tendrá que esperar hasta 2017

No obstante, como todo nuevo paso que se dé en FCC, el futuro de Portland vendrá determinado por la máxima que se ha marcado su matriz: rentabilidad, rentabilidad y rentabilidad. Y es que, tras rechazar poner en marcha un nuevo plan estratégico -"no vamos a hacer ningún plan estratégico, nuestro plan estratégico se llama normalidad", ha insistido el consejero delegado-, la compañía ha trazado sus grandes líneas rojas sobre tres puntos: la vuelta al beneficio, que prevé alcanzar este mismo año; seguir generando caja positiva, lo que limitará su concurrencia a contratos a sólo aquellos que garanticen elevadas Tires (tasas de rentabilidad); y el retorno al dividendo.

Para alcanzar este último objetivo, la empresa debe cumplir previamente otras tres condiciones: reducir deuda en 1.500 millones (ya han hecho el grueso con 1.000 millones), recortar el ratio de apalancamiento a 4 veces (frente a a las 6,2 veces actuales) y tener un ebitda de 750 millones sobre el perímetro de sociedades que han entrado en el reciente acuerdo de refinanciación -Aqualia España, FCC Medio Ambiente España y FCC Construcción-.

El grupo prevé cerrar este triángulo virtuoso en 2017. Para entonces, Slim podría haber visto cristalizar ya las primeras sinergias de los imperios que ha construido a los dos lados del Atlántico, ya que FCC concurrirá con las empresas del magnate azteca a concursos, fundamentalmente de construcción e infraestructuras en Latinoamérica.

Borrón y cuenta nueva. Es el mensaje que ha transmitido el consejero delegado de FCC, Juan Béjar, en la presentación de resultados de la compañía, que ha conseguido volver a generar caja positiva en 2014, al pasar de -188,1 millones de euros de cash flow libre al cierre de 2013 a 45,4 millones un año después, y que ha mejorado un 12% su ebitda gracias, en gran parte, a Cementos Portland, filial cuyo futuro podría sufrir importantes cambios en el medio plazo.

Noticias de FCC Refinanciación Rentabilidad Reino Unido Venta Juan Béjar Esther Koplowitz
El redactor recomienda