La Audiencia tumba la petición de CUP de anular la venta de Catalunya Banc a BBVA

La Audiencia Nacional ha rechazado suspender cautelarmente la venta al BBVA de Catalunya Banc, tal y como había solicitado la formación nacionalista catalana Candidatura D'Unitat Popular (CUP). El auto rechaza esta medida cautelar con el argumento, entre otros, de que "pretender que el valor [de venta] venga determinado por la recuperación del dinero público aplicado, resulta utópico".

El pasado mes de julio, el BBVA ganó la subasta por la entidad catalana organizada por el FROB, a la que habían presentado también ofertas el Banco Santander y CaixaBank, lo que convirtió al grupo presidido por Francisco González en el segundo por cuota de mercado en Cataluña. BBVA pagó 1.187 millones por la entidad, aunque con una serie de garantías que pueden minorar este importe hasta en 1.000 millones.

Tras esta adjudicación, la CUP interpuso un recurso a finales de septiembre para pedir la anulación de la decisión del Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) y en él solicitaba que se suspendiera hasta que la Audiencia Nacional tomara una decisión al respecto. En un auto fechado el martes, al que ha tenido acceso El Confidencial, la Sala de lo Contencioso-Administrativo de la Audiencia Nacional responde que no lo hará, e impone las costas del procedimiento a CUP.

De traca. AudiènciaNacional desestima petició CUP sobre CX: diu que recuperar diner públic rescat bancari és "utòpic" pic.twitter.com/u0VUyTsud4

En esta resolución, el tribunal ofrece varios argumentos para negarse a la suspensión cautelar. Para empezar, señala que esta venta "ha contado con la conformidad del Banco de España y de la Comisión Europea, todo ello referido a un Plan de actuación ante circunstancias excepcionales del que en este contencioso solo nos encontramos con la impugnación del Acuerdo de la Comisión Rectora del FROB de 21 de julio de 2014, referido a la aceptación de la oferta de compra de Catalunya Banc SA (CX) por parte de BBVA".

Es decir, que no se impugna todo el rescate de las cajas, sino sólo la venta de esta entidad, ni siquiera su nacionalización: el auto recuerda que "todas las acciones de CX las ostentaba ya el FROB, adquiridas como consecuencia según señala este Organismo de su enorme valor negativo, en afirmación que prima facie puede resultar cierta, y no es el momento para analizarla, sin que, además, se trate de la única entidad habida en estas circunstancias".

El valor no es el de las ayudas, sino el de mercado

Asimismo, señala que "la parte [CUP] no precisa la existencia de perjuicios concretos que sean de reparación difícil o imposible, frente a unos perjuicios ciertos que podrían derivarse de la suspensión del acuerdo impugnado, como consecuencia de las acciones que pudiera entablar el adjudicatario y del transcurso del tiempo". Hay que imaginar las consecuencias de anular la venta y tener que proceder de nuevo a la misma, así como la casi segura demanda que presentaría BBVA en ese caso; frente a eso, CUP no alude a ningún prejuicio concreto, según la Audiencia. A su juicio, "el interés público sí puede sufrir perjuicios por la demora, con el deterioro de la situación y las posibles acciones de la Entidad adjudicataria".

Pero el razonamiento más llamativo se refiere al precio de venta de Catalunya Banc, con una pérdida de 11.000 millones para el Estado: "Toda la argumentación respecto al valor de la Caja, y cual debía ser el precio de adjudicación, no puede acogerse en la forma que se plantea, el valor es el que da el mercado, y aquí se aprecia que se trataba de una entidad con un elevado pasivo que la hacía inviable. Pretender que el valor venga determinado por la recuperación del dinero público aplicado, resulta utópico".

"Podrá discutirse todo, pero en este momento destaca la oferta de la adjudicataria frente a las formuladas por las otras dos Entidades intervinientes, y también repetir que la situación de deterioro de una entidad bancaria suele producir efectos negativos por la alarma que se produce y el transcurso del tiempo", añade la Audiencia.

Catalunya Banc, que opera con la marca comercial CatalunyaCaixa, acumulaba más de 13.000 millones de euros en ayudas, de ellas, 12.052 millones directamente del Estado y otros mil millones del Fondo de Garantía de Depósitos (FGD) para dar liquidez a los miles clientes a los que vendió participaciones preferentes y deuda subordinada.

Además, anticipa que más adelante se pronunciará sobre la posible falta de legitimación de la CUP para iniciar el litigio, cosa que, de decidirse finalmente de esa manera, daría lugar al archivo del procedimiento, según las fuentes consultadas.