Permira mete un bocado a la deuda de Telepizza y da entrada a KKR en el capital

El secreto está en la deuda, y con ella han sabido jugar Permira y Carbal para reducir a casi la mitad los compromisos financieros de Telepizza, dar entrada a nuevos accionistas e impulsar su plan de internacionalización. Todo de un plumazo.

Las dos firmas de capital riesgo han desconsolidado de la cadena de pizzerías 200 millones de deuda que iban ligados a la compra de Telepizza y han utilizado una parte en dar entrada a nuevos socios, que han capitalizado parte de estos compromisos financieros, según confirman fuentes financieras e El Confidencial.

KKR capitanea al grupo de fondos que con esta operación se han hecho con el 49% del capital de la compañía, porcentaje que le ha dado derecho a contar con dos representantes en el máximo órgano de administración de la cadena de restaurantes, Mark Brown y José de Ochoa.

Permira y Carbal mantienen el otro 51% del capital y logran así cerrar la refinanciación de Telepizza al reducir de 485 a 285 millones de euros la deuda que sí consolida en la cadena de comida rápida, a la que se ha añadido un crédito revolver de 10 millones de euros. La consecuencia directa es el ratio de apalancamiento pasa de 7,3 veces ebitda a 3,7 veces.

Gracias a este acomodamiento de la estructura financiera, la compañía ha decidido pisar el acelerador en el plan de expansión internacional, con la vista puesta en crecer, sobre todo, por Latinoamérica -donde ya está presente en Bolovia y Panamá- y en Europa del Este, mercado que abordará usando su presencia actual en Polonia como trampolín.

“La operación nos aporta una gran estabilidad y la capacidad para avanzar en nuestro ambicioso plan de negocio, que nos permita mantener nuestra posición de liderazgo en el sector. Vamos a profundizar en nuestra ya importante expansión internacional y fortalecer nuestra posición, relanzando nuestra marca y remodelando nuestra red de tiendas, en España y el exterior”, explica Pablo Juantegui, consejero delegado de Telepizza.

Otro de los grandes objetivos de futuro de la compañía es renovar sus restaurantes, que también continuarán expandiéndose mediante el modelo de franquicias, además de los establecimientos propios. Con más de 1.200 puntos de venta y 25.000 empleados en el mundo, Telepizza es líder en España en su segmento. El año pasado entró en Rusia y Angola, lo que le permitiró cerrar el ejercicio con un 33% de sus ventas en el exterior.