El grupo Espirito Santo atraviesa una "grave situación financiera" y hay "irregularidades"

En el grupo Espirito Santo International S.A. han saltado las alarmas. Según recoge The Wall Street Journal, una de las filiales de la compañía ha publicado un informe que desvela la “grave situación financiera” que atraviesa el conglomerado, cuyas cuentas presentan serias “irregularidades”.

El responsable último de que haya saltado la liebre es el Banco Central de Portugal, que encargó una auditoría externa a KPMG de los resultados de 2013. Los problemas de la que es una de las mayores empresas lusas, con participaciones que van desde el banco hasta hoteles y un operador de hospitales, le van a obligar a vender 1370 millones de dólares en acciones.

El pasado diciembre ya se conoció que Espirito Santo International S.A. estaba muy apalancado y dependía en gran medida de la venta de deuda a un fondo de inversión en manos del holding Espirito Santo Financial Group, que a su vez la colocaba entre sus clientes.

Banco Espirito Santo amplia capital

La semana pasada, el Banco Espirito Santo, que como otras entidades portuguesas sufre los efectos de la recesión, reportó una pérdida neta de 89,2 millones de dólares en el primer trimestre y anunció una ampliación de capital de 1.045 millones de euros para reforzar su “ventaja competitiva” en la recuperación del país.

Los accionistas tendrán derecho de preferencia para comprar las acciones y el precio de suscripción de cada una será de 0,65 euros, lo que supone un descuento del 38,5% respecto a la cotización del cierre de hoy (1,058 euros).

El refuerzo responde también al objetivo de "crear reservas adicionales de capital" para hacer frente a las pruebas de estrés del Banco Central Europeo a los principales bancos del continente, que se realizarán entre julio y agosto.