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Las cajas salieron de pérdidas en 2013 gracias a 5.000 millones de créditos fiscales
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los beneficios por venta de deuda se disparan un 200%

Las cajas salieron de pérdidas en 2013 gracias a 5.000 millones de créditos fiscales

Las cajas de ahorros agrupadas en la CECA salvaron el ejercicio 2013 gracias a la norma gubernamental que les permite 'activar' parte de los activos fiscales

Foto: Isidro Fainé (d), Braulio Medel (Unicaja) y Amado Franco (Ibercaja). (Efe)
Isidro Fainé (d), Braulio Medel (Unicaja) y Amado Franco (Ibercaja). (Efe)

Las cajas de ahorros agrupadas en la CECA salvaron el ejercicio 2013 gracias a la norma gubernamental que les permite 'activar' parte de los activos fiscales diferidos (DTA). De esta forma, se apuntaron 4.936 millones de 'impuestos negativos', que convierten unas pérdidas de 1.139,1 millones en un beneficio después de impuestos de 3.795,8 millones. Estas entidades sufrieron una caída del 11,7% en el margen de intereses respecto a un año catastrófico como fue 2012, que compensaron parcialmente con un incremento del 186,8% de los beneficios por venta de deuda pública.

Según las cuentas anuales del sector, esta práctica ha sido generalizada, aunqueespecialmente notable en los casos de Catalunya Banc, NCG Banco, Liberbank y La Caixa. La entidad catalana, cuya subasta comienza la próxima semana,representa el caso más espectacular de esta práctica: registró unas pérdidas antes de impuestos de 1.464,7 millones, pero activó créditos fiscales por valor de 2.023,3 millones nada menos, lo que le permitió darun beneficio neto de558,5 millones (tras restar las operaciones interrumpidas se queda en 532,1). Este volumen supera incluso al de La Caixa, cuyo impuesto negativo fue de 1.398,2 millones y le sirvió para tornar unas pérdidas de 503,7 millones en ganancias de 894,5.

Como informó en febrero El Confidencial, el vaso puede verse medio vacío -sin esos créditos fiscales La Caixa estaría en pérdidas- o medio lleno: esos créditos fiscales le permiten realizar unas dotaciones extraordinarias que no habría hecho sin contar con ese colchón fiscal. Así es cómo lo ven en la Diagonal de Barcelona, ya que realizó unaprovisión extraordinaria de 184 millones por la expropiación de YPFa Repsol y adelantó todos los gastos del ERE de Banca Cívica y Banco de Valencia (898 millones en total) a 2013.

placeholder Vista de un 'stand' de la inmobiliaria de Catalunya Caixa. (Reuters)

La entidad gallega NCG Banco, vendida al venezolano Banesco en diciembre (operación pendiente de ser aprobada por Bruselas) sufrió un quebranto de 417,5 millones, pero se anotó unos activos fiscales ligeramente superiores (de 435,2) para poder publicarun ligero beneficio de 17,7 millones.El caso de Liberbank es mucho más pequeño en volumen, pero no así en términos relativos: la entidad -que prepara una ampliación de 500 millones por su probable suspenso en los test de estrés- perdió 9,1 millones en 2013, pero se apuntó unos impuestos negativos de 46,2, lo que resulta en un beneficio neto de 37,1 millones.

Más moderada fue Ibercaja, ya que activó sólo 38,1 millones de DTA, cantidad insuficiente para evitar una pérdida en el ejercicio de 31,8 millones, fruto de las dotaciones para la integración de Caja3. Finalmente, BFA-Bankia no escapó de esta tentación, aunque en este caso no le sirvió para dar la vuelta a la tortilla en sus resultados, sino para acrecentar un beneficio antes de impuestos de 1.185,6 millones hasta 2.054,4 (impuesto negativo de 868,7 millones).

Los DTA provienen de las fuertes provisiones realizadas en los años anteriores para sanear la exposición inmobiliaria, que no son deducibles fiscalmente sino que generan un activo fiscal para el futuro (diferido). Con el cambio de la norma del año pasado, el Gobierno garantiza que las entidades recuperarán todos esos activos aunque no tengan beneficio para ello en los próximos 18 años o aunque vuelvan a tener pérdidas o incluso se liquiden. Esa garantía permite que no tengan que restarse del capital, como exigen las normas de Basilea III, y que las entidades puedan 'activar' una parte y apuntársela como beneficio, que es lo que hicieron masivamente las cajas en 2013.

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2013, un año mucho peor de lo que parece

En todo caso, esta práctica no puede ocultar un año muy negativo para el sector, si bien no catastrófico como 2012, cuando las cajas perdieron 49.757 millones por los saneamientos realizados con el dinero del rescate europeo y por los Decretos Guindos de cobertura de la exposición inmobiliaria. El negocio puro bancario se deterioró, como demuestra esa caída del 11,7% en el margen de intereses, tanto por los bajos tipos de interés -que se trasladaron a los créditos pero no a los depósitos por la guerra del pasivo- como por la caída del crédito (CECA no proporciona información comparativa sobre esta variable).

En el lado positivo, tenemos en primer lugarlas ventas masivas de deuda pública realizadas por las entidades a fin de año, que junto al canje de preferentes y subordinada -que supone un beneficio para el emisor al canjearlas por debajo de su valor- dispararon un 186,8% los resultados por operaciones financieras. Y, en segundo lugar, la caída en picado de las provisiones respecto a 2012, del 78,9% en las pérdidas por deterioro de activos financieros (los saneamientos) y del 69% en otras provisiones. La caída no fue mayor por la obligación impuesta por el Banco de España de pasar a mora muchos créditos refinanciados.

Pero ningunode estos elementos fue suficiente para sacar al sector de pérdidas, sino sólo para reducirlas. De ahí que las entidades tuvieran que tirar de los créditos fiscales para salir de los números rojos. Finalmente, llama la atención que los costes de personal no se redujeran el año pasado (crecieron un 0,3%), lo que se explica por el coste de los ERE acometidos masivamente por el sector y cuyo impacto en los gastos se verá a partir de este ejercicio.

Las cajas de ahorros agrupadas en la CECA salvaron el ejercicio 2013 gracias a la norma gubernamental que les permite 'activar' parte de los activos fiscales diferidos (DTA). De esta forma, se apuntaron 4.936 millones de 'impuestos negativos', que convierten unas pérdidas de 1.139,1 millones en un beneficio después de impuestos de 3.795,8 millones. Estas entidades sufrieron una caída del 11,7% en el margen de intereses respecto a un año catastrófico como fue 2012, que compensaron parcialmente con un incremento del 186,8% de los beneficios por venta de deuda pública.

CECA Cajas de Ahorros Luis de Guindos
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