Fondos de Alemania y Qatar pugnan por la sede de Telefónica en Barcelona

Hay voracidad en el mercado inmobiliario de Barcelona por activos de primera calidad. Y así, fondos alemanes como Deka o Difa o soberanos de países como Singapur o Qatar están en pugna por comprar una de las joyas de la capital catalana: la sede de Telefónica, el edificio de Diagonal 00, en la zona de Fórum. La torre de oficinas es propiedad del Consorcio de la Zona Franca (CZF), que lleva casi un año intentando colocar el inmueble en el mercado.

El CZF nunca ha reconocido de manera oficial que el inmueble esté en venta, pero en la práctica lleva meses enseñándolo a diversos interesados. Fuentes del sector aseguran que, como mínimo, hay cuatro grupos que han estudiado la adquisición a diversos niveles.

El CZF es una empresa pública que depende al 50% del Ejecutivo español y del Ayuntamiento de Barcelona. El delegado especial del Gobierno en el consejo de administración es Jordi Cornet, que lleva un par de años intentando sanear las pérdidas de la sociedad. Para ello, la venta de la sede de Telefónica, la joya de la corona del grupo, es crucial.

La principal razón por la que después de tantos meses la operación no se cierra es que el CZF pidió en su momento más de 100 millones por un inmueble en el que invirtió 56. La ventaja es que se trata de un edificio totalmente ocupado por Telefónica, que además paga 21 euros por m y mes, un precio muy por encima del actual de mercado, ya que el alquiler de las oficinas en Barcelona se ha derrumbado en los últimos años.

Vídeo: Así es la sede de Telefónica en Barcelona

Pero el edificio Diagonal 00, que es como se denomina el inmueble, no es de propiedad, sino que responde a underecho de superficie por 55 años. Sobre este terreno se eleva un rascacielos de 24 plantas y 110 metros de altura, un verdadero edificio singular.

Esta condición de concesión es lo que frena a algunos inversores a pagar la pretensión que espera el CZF, que han puesto sobre la mesa cifras que rondan los 80 millones de euros. Fuentes del sector inmobiliario han intentado que el Ayuntamiento de Barcelona acepte cambiar el régimen legal del terreno a cambio de una cantidad. Pero los 176 millones de deuda del CZF apremian y no hay tiempos para un cambio burocrático.

Subasta en unas semanas

El plan era conseguir firmar un proceso de due dilligence en exclusiva con un único comprador. Pero las reticencias en el precio han forzado el cambio de planes: en medios inmobiliarios se da por hecho que, en unas semanas, el CZF abrirá una subasta precisamente para aprovechar la avidez que hay en este momento por este tipo de activos en una ciudad que se ha puesto de moda entre los inversores.

Se estima que pueden participar hasta una treintena de grupos interesados, incluyendo family offices catalanas.

Qatar, el favorito

Los cataríes son los favoritos. No sólo por su poderío financiero sino también porque, como demostraron en la compra del Hotel Vela en Barcelona, no tienen mayor problema con la adquisición de activos inmobiliarios concesionales.

Sin embargo, la llave de la operación la tiene la propia Telefónica. La operadora firmó el contrato de alquiler con el CZF garantizándose un derecho de tanteo en caso de venta del inmueble. Fuentes del sector inmobiliario han asegurado que no tiene intención de adquirir el rascacielos que ocupa. Sin embargo, está utilizando este derecho para intentar que el nuevo propietario acepte una rebaja en el precio del alquiler, de manera que con la transacción consiga una rebaja notable que beneficie a la operadora.